El 29 de diciembre de 2023, Dolores Trinidad Mesa Paz, de 63 años, cerró una etapa de su vida que duró 45 años y ocho meses laborando para Correos de El Salvador, un anhelado trabajo que obtuvo en 1978.
Don Lolo, como es conocido en su natal Lolotique, en San Miguel, creció entre estampillas y sobres de cartas por ser hijo del encargado de la oficina del correo en su pueblo. Por decisión propia, estudió hasta 9.º grado, y cuando vio la oportunidad de trabajar para Correos de El Salvador por medio de un contratista, no la desaprovechó.
Un año más tarde fue contratado por la institución, en la que ejerció diversas funciones. Inició como ordenanza, luego fue vigilante de una caseta en San Salvador, y después, gracias a su buen desempeño, logró su traslado a la ciudad de San Miguel, donde fungió como cartero 4 o cartero ambulante, cubriendo las vacaciones de sus compañeros. En poco tiempo fue ascendido a cartero 2 y por 21 años repartió correspondencia en la zona del centro y el barrio La Merced de la ciudad de San Miguel.
«A mí me gustaba, era mi ilusión trabajar en el correo, y el trabajo que me asignaron era algo en lo que uno interactúa con todas las personas; la gente me llamaba cartero, tal vez no le saben el nombre, pero le demuestran confianza a uno», comentó Dolores Mesa con voz pausada. Lolo parece algo tímido, es de complexión delgada y también esposo y padre de cinco hijos.
El día que dejó su cargo de supervisor de carteros en la oficina de correos de San Miguel su familia lo esperaba afuera para darle la bienvenida a su retiro laboral, ya que su esposa, Dinora Argueta de Meza, asegura que él nunca dejó de trabajar, independientemente de la ocasión, aun si se encontraba enfermo.