Una de las principales apuestas en las metas de descarbonización del transporte aéreo internacional son los combustibles de aviación sostenibles, que representan el 65 % del ahorro de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) al 2050.
Así lo indica el documento titulado Descarbonizando los cielos: biocombustibles sostenibles de aviación, cuyo autor es el especialista internacional en Biocombustibles del Instituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura (IICA), Agustín Torroba, reitera el compromiso de sector de la aviación para reducir las emisiones, intentando lograr la neutralidad en carbono a partir de 2020 y apuntado a alcanzar emisiones netas de CO2 equivalentes a cero en 2050.
El documento, presentado durante la conferencia sobre Combustibles y Medioambiente del Comité de la Asociación Latinoamericana y del Caribe de Transporte Aéreo (ALTA), uno de los eventos principales de la Cumbre Panamericana de Biocombustibles Líquidos, realizado en la sede central del IICA, en San José, Costa Rica, sostiene que la meta de la industria es viable si se desarrolla la producción y el consumo de combustibles de aviación sostenibles.
«Los combustibles de aviación sostenibles derivados de materias primas biológicas o no fósiles, conocidos como biojet, pueden sustituir o complementar a los combustibles para aviación convencionales, reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero a lo largo del ciclo de vida del producto», explicó Torroba.
El documento resalta además que la agricultura podría cumplir un rol fundamental en la provisión de las materias primas necesarias para producir biojet.
«El sector agropecuario de las Américas cuenta actualmente con suficientes aceites vegetales, grasas animales, azúcares y almidones, alcoholes que constituyen las grandes familias de materias primas utilizables en la producción de biojet, con lo cual el continente está muy bien posicionado para ser un proveedor de diversificación energética produciendo combustibles de aviación sostenibles y así abastecer a este nuevo mercado«, acotó Torroba.
El desarrollo de los combustibles de aviación sostenibles podría también evitar la obsolescencia anticipada de las aeronaves más antiguas, ya que permite que todos los aviones reduzcan su huella de carbono neta sin necesidad de efectuar cambios técnicos en ellos, explica la publicación.