Las autoridades griegas urgieron ahora a evacuar un distrito periférico de Atenas ante el avance de un devastador incendio forestal, el segundo de la actual temporada estival en el país, que dejó 20 muertos en dos días.
Los bomberos urgieron a los 25,000 habitantes de Ano Liosia, situada al noroeste de la capital griega, a dejar sus hogares, después de que quedaran incendiadas varias casas en el barrio vecino de Fyli, según constató un periodista de AFP.
Grecia afronta una nueva ola con hasta 60 incendios desde el lunes en este país del sur de Europa, en que las temperaturas superan los 40ºC.
«Se trata de una situación sin precedentes, con unas condiciones meteorológicas extremas», aseguró el portavoz de los bomberos, Yannis Artopios, en declaraciones a la cadena de televisión griega ERT.
Artopios había anunciado unas horas antes la muerte de 18 personas, probablemente migrantes, en un bosque arrasado por las llamas en el noreste de Grecia, cerca de la frontera con Turquía y en una de zona de paso por parte de migrantes clandestinos.
Al no haber información de que algunos residentes de la zona estuvieran desaparecidos, «se está investigando la posibilidad de que se trate de personas entradas ilegalmente en nuestro país» dijo el portavoz de los bomberos, sobre unos decesos que se produjeron en el parque nacional de Dadia, al norte de la ciudad de Alejandrópolis.
El lunes ya habían sido hallados muertos un presunto migrante y un pastor a causa del fuego.
Las llamas siguen propagándose en la zona de Alejandrópolis y también en las islas de Eubea y Citnos en el mar Egeo y en la región de Beocia.