España, Grecia e Italia son los tres países de la Unión Europea más afectados por los incendios forestales en lo que va de 2023, indicó el monitoreo del Sistema de Información Europeo de Incendios Forestales (EFFIS), que apoya a los servicios encargados de proteger los bosques contra incendios en la región.
Nada apunta a que la situación mejore en los próximos meses, cuando los pronósticos de la Organización Meteorológica Mundial y del observatorio europeo Copernicus revelaron la semana pasada que la ola de calor apenas comienza a mitad de año. Julio ha sido hasta el momento el mes más cálido jamás registrado.
Los datos de EFFIS indicaron que España ocupa el primer lugar en pérdidas por los incendios, con 69,401 hectáreas quemadas hasta su reporte del 22 de julio, el cual se actualiza cada semana por las autoridades.
Le sigue Grecia, con 54,990 hectáreas quemadas; e Italia, con 52,019 terrenos hechos cenizas. En los 27 países que conforman la Unión Europea se han quemado 234,750 hectáreas, de las que 176,410 se acumularon entre España, Grecia e Italia, es decir, el 75 % del total.
«El continente europeo se enfrenta a una lucha cada vez más desafiante para combatir estos devastadores desastres naturales. El aumento de las temperaturas globales y la frecuencia cada vez mayor de los fenómenos meteorológicos extremos ya han provocado un aumento en la cantidad y la intensidad de los incendios forestales, que se tragan rápidamente grandes extensiones de vegetación y tierras boscosas», compartió en su más reciente análisis Copernicus.
En el cuarto lugar, se encuentra Francia, con 21,524 hectáreas consumidas, y después Rumania, con 15,131 hectáreas.
A mediados de julio, el incendio forestal en la isla española La Palma, alimentado por la ola de calor, obligó la evacuación de más de 4,000 habitantes. Un escenario que revivió la tragedia de la erupción volcánica de las islas Canarias en 2021.
Para el observatorio europeo, los incendios a gran escala no solo representan una amenaza para el medioambiente, sino también para los asentamientos humanos.
En las últimas semanas, Grecia ha sido el país protagonista de las consecuencias de las altas temperaturas y llamas crecientes, donde los bomberos han luchado a diario para lograr extinguir el fuego. Entre las zonas densamente pobladas, como los centros turísticos perjudicados, se encuentran las islas de Corfú y Rodas y los alrededores de Atenas.
En una semana, el área total quemada en Grecia aumentó cinco veces el valor promedio anual para el período de referencia 2006-2022, destacó Copernicus.
En Italia tampoco es alentadora la situación, ya que la asociación ambientalista italiana Legambiente denunció que de las más 50,000 hectáreas calcinadas, unas 41,365 se quemaron en Sicilia, otras 7,390 hectáreas en Calabria, un total de 1,456 hectáreas en Apulia y 284 hectáreas en Abruzos. Solo en la provincia de Palermo, en los últimos tres días, casi 15,000 hectáreas han sido cubiertas por las llamas, señaló. «El Gobierno debe intervenir cuanto antes para frenar la plaga de incendios que azota al país», insistió.