En la octava emisión de «Si el dinero hablara», un programa de la Superintendencia del Sistema Financiero (SSF) en conjunto con «Diario El Salvador» que busca compartir historias alcanzables de éxito financiero, se entrevistó a Moisés Brito, director de la empresa Choricería Brito.
La historia de esta compañía recoge el trabajo de cuatro generaciones de la familia Brito, las cuales se han dedicado a la elaboración de embutidos artesanales en el municipio de Nahuizalco, en Sonsonate.
Sin embargo, a pesar de ser un emprendimiento con una larga tradición, fue hasta la cuarta generación, a la cual pertenece Moisés, cuando se formalizó la empresa y se diseñó una visión de expansión.
«Al llegar a la cuarta generación, que es la mía, yo traigo la idea para San Salvador. Me gradué de la Universidad Centroamericana (UCA) y ahí adquirí un premio de la Fundación Bancaja de España para formalizar la idea del proyecto de embutidos artesanales», comentó.
Ese incentivo, sumado a una base de ahorro que mantenían a raíz de años de trabajo, le permitió formalizar la empresa de su familia. A partir de ello, llevó la esencia de los embutidos de Nahuizalco a otras zonas del país.
«Aparte de los ahorros, siempre hemos trabajado de la mano con la banca salvadoreña, y hemos obtenido apoyo financiero cuando ha sido necesario. Hemos tratado que las inversiones estén bien encaminadas y utilizando el apalancamiento del cual hemos sido beneficiarios», indicó Brito.
El crecimiento a partir de la adecuada inversión de capital ha sido exponencial, pues ahora se han atrevido a innovar en el sector con mezclas como el Choriloroco, una mezcla entre chorizo y loroco; a la vez, han empezado a diversificar vendiendo carnes adobadas.
«Diseñamos un pequeño plan que abarcara no solamente finanzas para necesidades personales, sino también las necesidades que surgieran en el emprendimiento», apuntó.
Por otro lado, aseguró que este es el mejor momento para emprender o expandir los negocios, pues el país está viviendo una transformación con la nueva administración gubernamental.
De acuerdo con el empresario, en los próximos años Choricería Brito llegará a los 14 departamentos del país; además, mantiene un enfoque hacia la exportación directa, pues actualmente envía productos a través de otras compañías que se dedican a llevar productos nostálgicos a la diáspora.
«Es el mejor momento para emprender. El Salvador está transformándose en todo sentido. Nosotros como empresas tenemos ganas de seguir expandiéndose por esta transformación», finalizó.