La noticia fue publicada por medio de un comunicado oficial que la reina Isabel II falleció este día, a sus 96 años de edad. «La reina murió en paz en Balmoral esta tarde. El rey y la reina consorte permanecerán en Balmoral esta noche y regresarán a Londres mañana», se lee en el comunicado que ha conmocionando al Reino Unido y al mundo.
Desde tempranas horas, medios internacionales ya habían informado que los doctores de la reina Isabel II se encontraban «preocupados» por su salud, por lo que el príncipe Enrique y su esposa Meghan viajaron hasta Escocia para permanecer con ella.
El protocolo de «Operación Puente de Londres» indica que su hijo mayor, el príncipe Carlos, toma automáticamente el cargo como monarca.
El deterioro de la salud de Isabel II se aceleró en los últimos días. El martes había recibido al primer ministro dimisionario, Boris Johnson, y a su sucesora, Liz Truss, en su castillo escocés de Balmoral, renunciando por primera vez en su largo mandato a celebrar este acto protocolario en Londres, para evitar un viaje de 800 kilómetros.
La salud de la reina, que pese a su avanzada edad mantenía hasta entonces una muy apretada agenda, empezó a preocupar al país cuando el pasado 20 de octubre, tras cancelar un viaje oficial a Irlanda del Norte y «aceptar a regañadientes el consejo médico de guardar reposo», pasó una noche hospitalizada para someterse a unas pruebas médicas cuya naturaleza nunca se precisó.
La noticia solo se conoció cuando, ante una filtración a la prensa, el palacio real tuvo que reconocer que no había estado simplemente descansando como habían hecho creer.
Desde entonces la reina tuvo que renunciar a eventos como la conferencia de la ONU sobre el clima, en noviembre de 2021 (COP26) en Glasgow, sus habituales festejos de Navidad, o el tradicional discurso del trono con que cada año inauguraba la nueva sesión parlamentaria, una de sus funciones constitucionales más importantes que dejó a cargo de Carlos.
La reina Isabel II sería enterrada en la Capilla Conmemorativa del Rey Jorge VI del Castillo de Windsor, a lado de su esposo, el duque de Edimburgo, de anunciar su muerte. Previamente, se realizaría una gira por todo el Reino Unido, iniciando desde Escocia y finalizando en Gales.