Salcoatitán tiene una joya: Germinal Museo de la Imprenta, una exposición de máquinas antiguas que datan de finales del siglo XlX. También retrata pasajes significantes de la historia salvadoreña, como tener parte del equipo que fue utilizado para hacer fotografías aéreas con el fin de producir los primeros mapas del país.
El Salvador se considera cuna de la imprenta, pues, según una reseña histórica del museo, los municipios de Texistepeque y Salcoatitán fueron los pioneros en esta rama.

Esta joya histórica es conservada por su propietario Francisco Lovo Molina, impresor de profesión y quien ha resguardado una vasta historia y máquinas de la imprenta salvadoreña, entre las que destacan una prensa tipográfica de 1830 y otra de 1860. La primera fue elaborada en Estados Unidos y, según registros, fue usada durante mucho tiempo en San Miguel.
En el museo también hay escritos, una colección de piezas de tipografía elaboradas a mano y una copia en latín de la Biblia impresa por el alemán Johannes Gutenberg, el pionero de la imprenta mundial, que data de 1492.

Todos los elementos tipográficos se guardaban en un chibalete o gabinete que se usó por más de 500 años. Además, hay maquinaria aún en óptimas condiciones con datos curiosos, como una guillotina que tiene 131 años de uso y a la que nunca se le han afilado sus cuchillas. Fue elaborada en Francia en 1890 y tiene la característica de que es accionada por un volante manual con una capacidad para partir 500 pliegos de papel en un solo tiraje.
Según la historia, la imprenta en sus inicios estuvo marcada por un método que consistía en aplicar tinta tipo óleo sobre piezas metálicas o de madera, llamados tipos, para crear textos a base de presión con un sello. También se destaca que esta industria comenzó como una acción artesanal que con el paso del tiempo logró revolucionar al mundo. En 2000 fue declarada el invento del milenio.
«Este lugar representa historia. Una persona amante de la historia y la cultura decidió traer máquinas desde San Miguel para ponerlas en exhibición y explicar la evolución que ha tenido con el paso del tiempo. Para nosotros es grato recibir turistas. Por cuestiones de pandemia hemos registrado entre 250 y 300 personas por mes, pero antes eran más. Es motivante que visiten Salcoatitán por este museo», expresó Adriana González, encargada de atención al cliente del Germinal Museo de la Imprenta.