Santa Ana y San Miguel empataron 0-0 y quien celebró fue San Salvador que no pudo ganar el sábado . La división de honores entre pumas y garroberos, más la diferencia de goles, le permiten a los metropolitanos salvar el liderato en la Liga Nacional de Fútbol (LNF).
Este domingo en el Óscar Quiteño, los minutos iniciales tuvieron a un San Miguel apretando fuerte arriba para dejar constancia que venia por no menos que la victoria, pero conforme avanzó el crono Santa Ana también buscó imponer su localía y lo evidenció con un remate de Bryan Polanco que el meta Brandon Hernández consiguió desviar para evitar la anotación.
En adelante el duelo pintó de efimeros dominios en ambos lados y sobre todo de mucha disputa por la pelota en la zona ancha lo que provocó fluyeran poco las ocasiones de gol durante todo el primer acto.
Los pumas le apostaron a sus acostumbrados desbordes por las bandas y los garroberos probaron fórmulas, entre ellas el pelotazo para buscar al debutante Javier Lezcano que fue pillado en varias ocasiones en posición adelantada y tampoco pudo safarse del macaje de Jason Landaverde.
De ahí que tanto la visita como los anfitriones tuvieron muy pocas ocasiones de abrir la lata, y los escasos chances fueron remates que acabaron como «peluchitos» en los guantes de los porteros, por lo que no tuvo ninguna rareza que se fueran a la pausa para los 15 minutos de descanso con el marcador inmaculado, es decir 0-0.
En el complemento el partido se vio bastante frenado por las faltas, pero hubo un par de ocasiones de gol. Por los pumas lo intento Cristian Caicedo y Efrain Cárcamo desde el tiro libre, y los migueleños tuvieron una contra de Lezcano que centró, pero no encontró quien la empujara al fondo de la red. Al final ambos equipos debieron conformarse con el empate en blanco.