El Gobierno de Panamá sentó su apostura con respecto al conflicto en el Sahara marroquí, señalando que la iniciativa de autonomía es la única solución para esta situación, sumándose así a los países de América que apoyan esta postura.
La declaración de Panamá fue firmada y presentada al final del encuentro celebrado por videoconferencia entre el ministro de Asuntos Exteriores, Cooperación Africana y Marroquíes Residentes en el Extranjero, Nasser Bourita y su homóloga panameña, Janaina Tewaney Mencomo, quien manifestó la convicción de Panamá de que la solución de este conflicto sólo puede ser realista, como se afirma y se confirma en las resoluciones del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
En su declaración, Panamá asegura que esta iniciativa de autonomía también debe incluir una perspectiva de solución del conflicto que tome en cuenta a todos los interesados para sentar las bases de una solución con el compromiso de todas las partes.
Así, Panamá se une a la mayoría de los países de la comunidad internacional que han designado la iniciativa de autonomía como única solución al diferendo regional sobre el Sáhara marroquí, apoyando los esfuerzos serios y creíbles de Marruecos, y alejándose así de las soluciones extremas y poco realistas que retrasan la integración regional en el norte de África.
Panamá se comprometió, por escrito, a actuar de conformidad con esta Declaración Conjunta y se sitúa ya en una perspectiva que ayudará a las partes concernidas a encontrar una solución duradera y definitiva.
La nación centroamericana defiende hoy, de manera inequívoca, una solución realista de compromiso, que allane el camino a las partes y a las Naciones Unidas para aplicar esta solución que ofrece paz, estabilidad y prosperidad a la región del Magreb y del Sahel.
Además, demuestra con esta declaración sabiduría y lucidez, abre, con determinación, el camino a una rica cooperación con Marruecos que, gracias a la Visión de el Rey Mohammed VI, se ha convertido en un centro regional, un puente entre los continentes africano y americano, y una potencia creíble para sus socios.