Los partidos políticos que presentarán candidatos para las elecciones del próximo año tendrán como fecha máxima para efectuar sus comicios internos el 20 de julio, ya que la Asamblea Legislativa aprobó disposiciones transitorias que ampliaron el plazo para ese proceso.
La presidenta del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Dora Esmeralda Martínez, expuso la semana anterior ante los diputados de la comisión política que, de aprobarse la reestructuración de los municipios, se volvía necesario reacomodar la fecha límite en que los partidos políticos podrían efectuar sus elecciones internas.
Dicho plazo vencía el 5 de julio, pero dejaba poco tiempo a los institutos para definir a sus candidatos. Los diputados aprobaron que este plazo se prorrogue y que los partidos efectúen sus elecciones a más tardar un mes y 15 días calendario antes de que el TSE convoque a elecciones generales para que la población elija a presidente de la república, diputados de la Asamblea Legislativa, concejos municipales plurales y diputados que representarán a El Salvador en el Parlamento Centroamericano.
Esa convocatoria, según el calendario electoral, está prevista para el 6 de septiembre; desde esa fecha se deben contar 45 días hacia atrás.
El presidente de la Asamblea Legislativa, Ernesto Castro, expuso el martes pasado que estaban en toda la disposición de apoyar al tribunal electoral, pero solicitó a los magistrados del TSE darle celeridad al proceso de voto desde el exterior, que actualmente se encuentra entrampado al no estar definida la empresa que implementará esta modalidad del sufragio.
«Queremos que la diáspora tenga la certeza de que podrá votar, reconocemos su lucha por que se les reconozca el derecho al voto», expuso Castro.
Ningún partido político había efectuado sus elecciones internas, lo que facilitará el reacomodamiento de las nuevas fechas. Según detalló ayer la presidenta del TSE, la Dirección de Organización Electoral también entregó su informe técnico con la nueva cantidad de alcaldías, que pasaron de 262 a 44.
El tribunal electoral ya había manifestado que no se cambiarán los 1,595 centros de votación previos y que se garantizará que la población salvadoreña continúe ejerciendo el voto residencial.