La efectividad del Plan Control Territorial ha dado resultados históricos en la reducción de homicidios, a pesar que desde el inicio de gestión del presidente de la república, Nayib Bukele, en junio de 2019, recibió el país con un promedio diario de 9 asesinatos.
El pico más alto de homicidios registrados en el país en los últimos 20 años sucedió en 2015 durante el segundo gobierno del FMLN cuando el promedio diario fue de 18.2. Para combatir la criminalidad en el país, el actual gobernante puso en marcha la Fase I de la estrategia de seguridad que permitió cerrar el 2019 con un promedio de 6.7 homicidios al día.
Mucho de este esfuerzo tiene que ver con la operatividad policial y de la Fuerza Armada que poco a poco fueron tomando el control de las colonias, barrios y comunidades que son asediadas por las pandillas.
Las capturas de criminales fueron más recurrentes y en los primeros 15 días de anunciado el Plan Control Territorial fueron arrestados más de 1,000 delincuentes, y en los días siguientes las nuevas autoridades de Centros Penales tomaron el control de las cárceles del país desde donde salían las órdenes para que se cometieran asesinatos, extorsiones y otro tipo de hechos delictivos.
Todos los privilegios que los gobiernos del FMLN dieron a los criminales en las prisiones, entre estos, llamadas telefónicas ilimitadas para hablar con sus compinches o para extorsionar, servicio de Internet, instalación de plasmas, ingreso de bailarinas, realización de porno fiestas les fueron quitados.
Y aunque los cambios para combatir la delincuencia eran evidentes, durante dos años aproximadamente los diputados de la anterior Asamblea Legislativa bloquearon el financiamiento para la Fase II y III del Plan Control Territorial. Los ARENA y FMLN negaron sus votos para financiar la estrategia de seguridad con la que se buscaba dotar a la Policía y la Fuerza Armada de insumos para salvaguardar la vida de los salvadoreños.
Fue hasta el 2021 que la nueva Asamblea Legislativa aprobó los fondos que necesitaba el gobierno para seguir financiando las siguientes fases de la estrategia de seguridad. Los resultados han sido tales que el año pasado fue declarado como el más seguro en la historia del país por la reducción de homicidios al punto de promediar 3.1 al cierre de 2021 y 72 días acumulados con cero asesinatos en el país en la gestión del presidente Bukele.