En el marco de la fase de extracción del combate frontal a las pandillas, la Policía Nacional Civil junto con la Fuerza Armada Salvadoreña continúan capturando a los mareros que pretenden huir de la justicia y se esconden en diferentes zonas de El Salvador.
Uno de los últimos detenidos es Pablo Antonio Ortíz Vazquez, alias Chonta, perfilado por la PNC como miembro activo de la 18.
El Chonta se escondía en Panchimalco y de acuerdo con las autoridades cuenta con antecedentes desde el 2017 por homicidio, privación de libertad y limitación ilegal a la libre circulación.
Será procesado por agrupaciones ilícitas y podría enfrentar más de 20 años de prisión, luego que los diputados de la Asamblea Legislativa aumentaron las penas de cárcel a los miembros de las estructuras terroristas.
En otro operativo ejecutado en el cantón Tempisque, Guacotecti, Cabañas, el ejército ubicó a Juan Carlos Rivas Chávez, alias Chibola, un homeboy de la Mara Salvatrucha que se encargaba de asesinar a las personas encomendadas por la pandilla.
En el cantón El Aguacate, Sensuntepeque, Cabañas, detuvieron a Wilber Noé Quinteros Lizano, alias Tizón o Simpson, homeboy de la MS con la función de resguardar armas de fuego, droga y otros ilícitos para la pandilla. El terrorista posee antecedentes por agrupaciones ilícitas y tráfico ilícito.
El delincuente posee antecedentes por homicidio tentado, agrupaciones ilícitas, y extorsión.
Mientras que Carlos Francisco Orellana Flores, un miembro de la MS-13, con antecedentes por agrupaciones ilícitas y resistencia, fue localizado y arrestado en Colón, La Libertad. El marero fue entregado a la Policía.
En tanto en el Reparto La Campanera, Soyapango, San Salvador, el personal de la FAES ubicó a David Alejandro Sánchez Miranda, alias El Negro, integrante de la 18. En el procedimiento se le encontró información que lo vincula con la estructura criminal.
Los cuerpos de seguridad siguen ubicando a terroristas que intentan escapar de la guerra contra las pandillas.