En la principal autopista de Caracas, los ojos del fallecido presidente Hugo Chávez ocupan, una tras otra, las vallas con propaganda electoral como parte de la campaña del chavismo para llamar al voto este 6 de diciembre.
Según, una encuesta de la firma Datanálisis, elaborada en septiembre, el 61 % de los venezolanos no se identifica con dirigentes ni de chavismo ni de oposición. Según el mismo estudio, apenas entre 24 % y 34 % del electorado está dispuesto a sufragar el 6 de diciembre.
«No tengo ganas de votar, porque uno siempre ha votado y sigue pasando lo mismo. El voto de uno es perdido. Nunca hay un cambio ni una mejora», comentó a la Voz de América, Stalin Tali, un trabajador informal de 48 años.
Sin embargo, otros como Abel Monroa, empleado de restaurantes, ve en las parlamentarias una oportunidad. «Lo que está pasando en Venezuela es problema de todos y con el voto tenemos que resolver toda esta situación. país. Siempre he estado con el chavismo, pero de aquí al 6 de diciembre lo puedo pensar mejor», dijo.
El gobierno interino de Juan Guaidó y otros 37 partidos llamaron a boicotear las parlamentarias, por considerar que no hay garantías de transparencia, y en respuesta, convocaron a una Consulta Popular del 5 al 12 de diciembre para desconocer ese evento.
La Unión Europea y Estados Unidos no reconocerán los resultados de esta elección, lo que, a juicio del director del Centro de Estudios Políticos de la Universidad Católica Andrés Bello, Benigno Alarcón, seguirá deslegitimando a Maduro frente a la mayoría de las democracias del mundo.