Apreciados lectores.
Me llena de alegría poder compartir nuevamente con ustedes, a través de este espacio, no sin antes expresarles mis mejores deseos para ustedes y sus familias en este nuevo año que iniciamos. El año que hemos dejado atrás fue difícil y con muchas lecciones, pero no tengo dudas de que tiempos mejores vendrán para nuestro país.
Tan es así que una de las principales problemáticas que estamos enfrentando —desde inicios del año pasado—, la pandemia por la COVID-19, que ha causado tanto dolor y que ha puesto a los sistemas de salud de todo el mundo en serias dificultades, cada vez estamos más cerca de implementar una de las estrategias más importantes: la vacunación, con la cual estaríamos generando inmunidad a la población salvadoreña ante esta enfermedad.
Más que como médico o como ministro de Salud, sino que con el traje de salvadoreño, de hijo, de hermano, entiendo la preocupación y expectativa de la llegada de la vacuna a nuestro territorio. En ese sentido, puedo afirmarles que, como gobierno del presidente Nayib Bukele, estamos haciendo lo humanamente posible para iniciar con esta estrategia de vacunación en el corto plazo.
Como lo he compartido en diferentes ocasiones, esto es producto de pláticas que iniciamos de forma temprana, cuando muchas farmacéuticas empezaban en esta carrera por formular una vacuna efectiva contra el virus. De esa forma, establecimos el acuerdo para contar con ella, con base en criterios estipulados por organismos internacionales, tales como efectividad mayor al 50 %, con un efecto en la disminución de la mortalidad que causa la enfermedad y que sea accesible a escala mundial para todas las regiones.
Desde el Ministerio de Salud (Minsal) hemos contemplado y estamos trabajando en la logística no solo para la vacuna de AstraZeneca, sino que también para aquellas que requieran de ultracongelación. El Centro Nacional de Biológicos (Cenabi), que es un plantel del Minsal, tiene la capacidad de almacenar este tipo de biológicos que permanecen bajo cadenas estrictas de frío; de ahí serán distribuidas a toda la red nacional de hospitales.
Vamos a garantizar a la población un lugar con las condiciones necesarias para implementar esta estrategia de vacunación; dentro de la parte de la logística de la administración de la vacuna, estamos adecuando 156 lugares, distribuidos en todo el territorio nacional, y para ello, nos encontramos preparando a 2,000 equipos de salud que llevarán hasta el último rincón del país esta estrategia.
Considero importante no perder de vista que lo medular de esta acción no es únicamente la llegada de la vacuna a nuestro país, sino que completar —en el menor tiempo posible— el esquema de vacunación a toda la población salvadoreña, es decir, el beneficio de esta vacunación no se obtiene con ponerle a tres o cuatro personas la vacuna, sino que el objetivo es cubrir a más del 65 % de la población, para que alcancen la inmunidad de rebaño.
Es por ello que todas estas acciones que les he comentado que estamos realizando dentro del sistema de salud a escala nacional están orientadas a contar con toda la logística necesaria para completar la cobertura universal, de forma breve, en cuanto la vacuna esté en nuestro territorio. Quiero ponerles un ejemplo, para que tengan la confianza y certeza en nuestro esquema de vacunación: solo el año pasado, en tan solo un mes, logramos vacunar a más de un millón de personas contra la influenza. Esto demuestra la robustez y capacidad del sistema.
De los 4.5 millones de salvadoreños que hemos trazado como público objetivo, es importante recordar que tenemos grupos priorizados para el primer lote de vacunas de la farmacéutica de AstraZeneca, de la siguiente manera: primera línea (120,000 personas); adultos mayores con enfermedades crónico-degenerativas (750,000) y población adulta mayor (1.4 millones); posterior se continuaría con la población en general, exceptuando a mujeres embarazadas, menores de 18 años y personas con ciertas patologías que pudieran generar complicaciones.
Al cubrir a los grupos poblacionales mencionados, de forma inmediata, estaremos disminuyendo el 90 % de las letalidades que suceden en nuestro país a causa de la COVID-19. Estamos cada vez más cerca de que esto sea una realidad, por tanto, les pido que mantengamos nuestra fe de que en un corto tiempo estaremos cumpliendo con una de las estrategias más importantes en el combate de este virus; sin embargo, no es la única, sino que todas las acciones que hemos venido realizando desde un inicio: retrasar la llegada del virus al país, fortalecimiento de toda la red hospitalaria para la atención de estos pacientes, manejo de personas con sintomatología leve mediante telemedicina, promoción de la salud, entre otras.
Como gobierno, desde el Ministerio de Salud, tengan la plena confianza de que estamos haciendo todo lo que se encuentra en nuestras manos para implementar la estrategia de vacunación en nuestro país; sin embargo, como un salvadoreño más, como médico que he visto las complicaciones que provoca esta enfermedad, les pido que no bajemos la guardia, que practiquemos el autocuido, que no nos expongamos, que sigamos los protocolos y cumplamos las medidas de bioseguridad, para evitar más complicaciones a causa de esta enfermedad.
Como Ministerio de Salud, estamos haciendo lo que está en nuestras manos para cuidarlo y darle la atención que necesita; solo le pido que usted también nos ayude y que se cuide mucho, usted y a sus seres queridos.
Mis mejores deseos para los salvadoreños siempre,
Francisco Alabí