Nunca en la historia reciente de la democracia salvadoreña hubo un hecho electoral que atrajera tanto como el que sucedió el domingo por la noche cuando un medio millar de personas se quedaron sin votar en la colonia Santa Marta debido a que se acabó la tinta indeleble.
Desde las 3:00 de la tarde del domingo 28F, Jesús Eliseo Vigil, de 29 años, se encontraba haciendo fila para ingresar al centro de votación ubicado en el parque de la colonia Santa Marta, en el barrio San Jacinto, de San Salvador para poder ejercer su derecho al sufragio.
El ambiente hasta ese momento se desarrollaba con tranquilidad, Jesús pensó que debido a la larga fila le tardaría aproximadamente una hora pasar a las urnas, sin embargo, a eso de las 3:30 de la tarde se empezaron a dar indicios de que la espera por dar el voto sería más larga de lo normal.
«A las 3:30 de la tarde comenzaron a decir que la JRV número 116 ya estaba cerrado porque ya no tenían tinta. Entonces comenzaron a pasar a los de las JRV 111 y 112, como a las 4:00 de la tarde cerraron esas JRV porque también se quedaron sin tinta», explicó Jesús.
Tras dos horas de hacer fila bajo el candente sol, el lugareño comentó que antes de las 5:00 de la tarde cerraron el centro y ya no dejaron entrar a nadie, los delegados de ARENA y el FMLN argumentaron que ya no había tinta en ninguna JRV.
SE GENERA CAOS
«La decisión generó un completo caos e inconformidad por parte de las personas que no habían votado. Ya como a las 7:30 de la noche dijeron que quizás hasta la madrugada iban a abrir para que pudiéramos votar», señaló Jesús.
Desde las 5:00 de la tarde al clamor y la exigencia de las aproximadamente 500 personas que no pudieron votar, se unieron otros 500 vecinos más, quienes exigían a las autoridades reabrir el centro para poder ejercer el sufragio.
Tras dos de un ambiente hostil y lleno de tensión un equipo del Tribunal Supremo Electoral (TSE) acompañado de la UMO llegaron al lugar con nuevos botes de tinta para que los lugareños pudieran ejercer el sufragio.
Sin embargo, los votantes tuvieron que esperar dos horas más para que las puertas del centro de votación fueran reabiertas a las 9:11 de la noche, poco a poco y en grupos de 25 personas un total de 348 residentes de la Santa Marta y sus alrededores pudieron cumplir con su derecho de votar para elegir a los nuevos diputados y alcaldes.
«Yo fui de los últimos cinco en votar, eso ya fue como a las 9:45, es decir más de seis horas después de que llegué a hacer fila al parque, Para mí lo que intentaron hacer fue un fraude, pero no lo pudieron lograr», indicó el lugareño.
Para Jesús lo que pasó el domingo fue una victoria para los habitantes de la Santa Marta. «Esperamos que al final sea una victoria para nosotros, porque ha sido un gran esfuerzo estar aquí desde las 3:00 de la tarde hasta casi las 10:00 de la noche», apuntó.
La opinión de Jesús es compartida por María Sánchez, 60 años otra lugareña quien también estuvo en el lugar para ejercer su derecho democrático desde las 4:30 de la tarde y logró hacerlo hasta las 9:30 de la noche. Para doña María la espera y el sacrificio realizado valió la pena.
«Ha valido la pena la espera, porque ya votamos. En ninguna elección había pasado todo esto acá en la Santa Marta, pero finalmente lo logramos, me siento satisfecha y contenta», declaró María.
Fiscalía no ha dicho si investigará este caso
El Fiscal General de la República, Raúl Melara no ha sido claro en afirmar si se realizará alguna investigación contra los implicados en este incidente que afectó el proceso de votación en la Santa Marta, simplemente se ha limitado a señalar los errores de los involucrados.
«No tener tinta para un centro de votación es falta de coordinación, falta de logística, falta de criterio, y este tipo de cosas obviamente que obstaculizan para que las personas voten, al final entiendo que hubo una resolución por parte de las autoridades del centro de votación de permitir que los que habían estado a las 5:00 de la tarde haciendo fila votaran y entiendo, que si lo hicieron ya después», afirmó el fiscal.