Con la eliminación del impuesto del 30 % sobre las transferencias de capitales de inversión, El Salvador se posiciona ahora como el país más atractivo para invertir en Centroamérica. La reforma aprobada recientemente por la Asamblea Legislativa de la Ley del Impuesto sobre la Renta permitirá que los fondos provenientes del exterior no paguen los impuestos solo por ingresar al país, como lo habían establecido los gobiernos pasados, convirtiéndose de facto en una barrera para la inversión.
De este modo, la iniciativa busca la promoción del empleo en las áreas de la industria y los servicios. Una modificación del artículo 3 de la ley garantiza la seguridad jurídica de los inversionistas, sean extranjeros o nacionales residiendo en el exterior, para proteger todo tipo de transferencias en concepto de inversión o remuneraciones.
Sin embargo, la ley mantiene vigente que todo ingreso debe tener un origen lícito para evitar la llegada de capitales provenientes de actividades delictivas. Es decir, se mantienen vigentes todas las reglas contenidas en la ley sobre el lavado de dinero.
Una vez que el capital ingrese íntegro a la economía nacional, generará movimientos y estos sí pagarán impuestos. Por ejemplo, fondos enviados por un salvadoreño de la diáspora para comprar un inmueble no pagarán el 30 % por ingresar al territorio nacional, pero sí se pagarán los impuestos a la transferencia de bienes.
La Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI) elogió la medida tomada por el Gobierno del presidente Nayib Bukele y aprobada por la Asamblea Legislativa. «Todo lo que vaya en reducción de la carga fiscal es importante para generar inversión», sostuvo el presidente de la gremial, Jorge Arriaza.
Y este impuesto no ha sido el único que el Gobierno del presidente Bukele ha eliminado. También eliminó la Contribución Especial para la Seguridad Ciudadana y Convivencia (CESC), en la que se gravaban las comunicaciones y supuestamente era para financiar el Plan El Salvador Seguro del segundo gobierno del FMLN. Se recolectaban $117.9 millones y la violencia aumentó.
El Gobierno también eliminó previamente los impuestos a todas las inversiones en tecnología y a las ganancias de bitcóin. De hecho, las transferencias internacionales a través Chivo Wallet estaban exentas de pago de impuestos.
A pesar de tener una bancada con mayoría calificada, el Gobierno descartó aumentar el IVA, como lo sugerían organismos internacionales. Tampoco se han aprobado impuestos sobre las ganancias a capital, herencias, a la propiedad o predial.
En suma, El Salvador es la mejor opción para los inversionistas extranjeros. Muchos ya se están dando cuenta de ello.