Manuel José Arce fue un líder político y militar que desempeñó un papel importante en la lucha por la independencia de Centroamérica y posterior consolidación de la República Federal. Su historia sigue siendo importante en la región y en El Salvador. Es una figura de gran importancia para la Fuerza Armada de El
Salvador (FAES), pues su experiencia militar y su liderazgo jugaron un papel crucial en varios aspectos de la vida político-militar posindependencia al buscar la estabilización política centroamericana.
Se desempeñó como el primer presidente de la República Federal de Centroamérica (1824) y el fundador de la Legión de la Libertad del Estado del Salvador, siendo una fuerza militar organizada de El Salvador en el siglo XIX. Esta legión desempeñó un papel crucial en el mantenimiento de la independencia y defensa
de la soberanía. La Legión de la Libertad del Estado del Salvador fue formada por voluntarios y líderes locales que se unieron para mantener la independencia y la consecución de una república soberana y la consolidación del nuevo Estado, contribuyendo fundamentalmente para la creación de la nación salvadoreña como la conocemos hoy.
«El Ejército vivirá mientras viva la república», frase atribuida al general Manuel José Arce. Dicha afirmación destaca la relación entre el Ejército y la existencia de la república o el Estado-nación. Su significado subraya que el Ejército es una institución fundamental para la seguridad y la defensa de la república, y que su existencia está intrínsecamente ligada a la propia supervivencia del Estado.
La idea detrás de esta frase es que, mientras exista la república o el Estado nación, habrá necesidad de un ejército para protegerla de amenazas externas e internas. Destaca la importancia de la institución militar en la preservación de la soberanía, la integridad territorial y la estabilidad del país. Asimismo, implica una relación de dependencia mutua entre el Ejército y la república: el Ejército depende de la existencia y el apoyo del Estado para llevar a cabo su misión, mientras que la república depende del Ejército para garantizar su seguridad y continuidad.
200 años después de su fundación, la Fuerza Armada de El Salvador es una institución permanente al servicio de la nación, es obediente, profesional, apolítica y no deliberante. Su misión es la defensa de
la soberanía del Estado y la integridad del
territorio.
En este bicentenario de la FAES (1824-
2024), tal como hace 200 años, su misión
es defender la nación, que nació en 1821 y que hoy se consolida con el liderazgo de su comandante general y presidente, Nayib
Bukele.
Este día conmemoramos con mucho
orgullo 200 años de fundación de la FAES,
institución del Estado cuyo rol ha sido protagónico en el mantenimiento de la paz, de
la cual gozamos todos los salvadoreños.
Encaminados al desarrollo, avance social,
económico y político.
La institución armada proporciona con
su accionar una mayor confiabilidad y admiración por parte de la población civil, a la
cual presta todo su servicio y, sobre todo,
ayuda en momentos de calamidad nacional, en su reconstrucción y a combatir el terrorismo.