Merkel, que regresa de una visita a Estados Unidos, visitará el pueblo de Schuld, en Renania-Palatinado, destruido en gran parte.
La visita tendrá lugar «por la tarde», dijo a la AFP una portavoz del Ministerio del Interior regional.
Cambio climático
Desde días atrás todo el oeste de Alemania las escenas se repetían: ríos desbordados, árboles arrancados, carreteras y casas inundadas. Las autoridades instaron a los habitantes a quedarse en casa o a subir a los tejados si fuera necesario.
Es una «tragedia» cuya magnitud «no se podía prever», dijo a Bild el ministro de Interior, Horst Seehofer.
«Estos caprichos meteorológicos extremos son las consecuencias del cambio climático», agregó.
Bélgica y Luxemburgo, países vecinos de las regiones alemanas más afectadas, también sufren las inclemencias del clima.
«Numerosas» casas están inundadas y tuvieron que ser evacuadas en todo el país, informaron las autoridades de Luxemburgo.
En Bélgica, las lluvias torrenciales que azotan desde hace varios días el sur y el este del país, dejaron cuatro muertos en las últimas horas en Verviers, al este, e importantes inundaciones, según fuentes oficiales. En total, el número de víctimas mortales por las lluvias en el país asciende a seis.
En Holanda, la provincia de Limburgo, que limita con Alemania y Bélgica, también ha sufrido importantes daños. La subida de las aguas amenaza con aislar la pequeña ciudad de Valkenburgo, al oeste de Maastricht.
Varias carreteras, entre ellas una autopista muy transitada, han sido cerradas ante el riesgo de inundaciones.