China está dispuesta a cooperar con Estados Unidos, pero la cooperación debe ser una vía de dos direcciones, dijo ayer el presidente chino, Xi Jinping, al reunirse con el secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken.
«China no le teme a la competencia, pero la competencia debe basarse en el progreso común, no en un juego de suma cero», manifestó el mandatario chino.
Xi afirmó que China está comprometida con la no alineación y Estados Unidos no debe formar pequeños círculos, y agregó que ambas partes pueden tener sus propios amigos y socios, y deben abstenerse de atacarse, oponerse o dañarse el uno al otro.
Reiteró que las dos potencias económicas deberían ser «socios, no rivales», advirtiendo a la vez a Washington que no aplique medidas para frenar su economía, como la prohibición de exportar semiconductores o el intento de arrebatar TikTok a sus propietarios chinos.
Blinken visita China por segunda vez en menos de un año.
En una reunión en el Gran Salón del Pueblo de Pekín, Xi aseguro que ambas potencias han logrado «algunos progresos positivos» desde que en noviembre se reunió con el presidente estadounidense Joe Biden. «Esperamos que Estados Unidos también pueda tener una visión positiva del desarrollo de China», dijo Xi.
El ministro de Relaciones Exteriores chino, Wang Yi, que también se reunió con Blinken, por más de cinco horas y media, le advirtió que la presión de Estados Unidos podría desencadenar una «espiral descendente» y definió como «primera línea roja» la cuestión de Taiwán, que Pekín considera parte de su territorio.