Cuatro miembros de la banda «Los Soroguaras» murieron y dos policías resultaron heridos en un enfrentamiento la madrugada de este miércoles en el valle de Amarateca, en el departamento de Francisco Morazán, Honduras.
La Policía Nacional de Honduras informó que entre los cuatro fallecidos se encuentra un cabecilla conocido como «El Soroguara», involucrado en un homicidio múltiple en el departamento de La Paz. Además, hay tres personas detenidas y decomisaron cuatro armas de fuego: tres fusiles y una pistola.
El operativo se desarrolló entre la Dirección Policial Anti Maras y Pandillas Contra El Crímen Organizado (Dipampco), junto a otras direcciones policiales, ya que tenían información de que la estructura criminal mantenía actividades ilícitas en esta zona.
Las autoridades indican que los delincuentes al detectar la presencia policial abrieron fuego. Los criminales trataron de huir en dos vehículos, una camioneta y dos motocicletas.
La banda es acusada de los delitos de extorsión en el transporte público, sicariato y desplazamiento forzado.
A principios de abril, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, prórroga, por tercera ocasión, eel estado de excepción, en 123 de los 298 municipios del territorio, para combatir la extorsión y la delincuencia. Pese a regir este tipo de medidas, las estructuras criminales no han dejado de operar y tomar el control en los centros penales.
La subsecretaria de Seguridad nombrada por Castro para liderar el plan para intervenir las prisiones, Jullissa Villanueva, expuso este miércoles la situación actual del sistema penitenciario a los delegados de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que realizan una evaluación esta semana en Honduras.
Villanueva reconoció los retos frente al proceso de rehabilitación y reinserción de las personas privadas de libertad.
Este martes se registró otro enfrentamiento entre pandillas que causó heridas en dos reclusos. El tiroteo se prolongó por cinco minutos en la cárcel de máxima seguridad «El Pozo», en el departamento de Santa Bárbara.
En el centro penitenciario de El Progreso en Yoro, la presa Bertilia Guzmán Rodriguez, de 30 años, fue asesinada por otra reclusa del módulo. La mujer fue apuñalada. Villanueva ordenó la investigación del caso y avances en siete días.