Los servicios empresariales a distancia (SED) conforman una de las industrias que se han mantenido pujantes en los últimos años, y pese a la pandemia ha registrado crecimientos sustanciales para el sector.
En 2020, el rubro de servicios (en plena crisis sanitaria) registró un incremento de 2 % en comparación con el año anterior, y en un lapso de cuatro años mostró un gran potencial al registrar un incremento en las exportaciones de 44 %, representando $123 millones adicionales.
«En Proesa se están haciendo varios esfuerzos conjuntos tanto con el Gobierno como con la empresa privada, además de otras instituciones sin fines de lucro, para ayudar a potenciar el sector de las TIC en el país», señaló la asesora de Inversiones en Servicios Comerciales Internacionales, Jéssica Bukele.
Los protagonistas de las SED siguen siendo los «call centers», en su mayoría bilingües, una industria multinacional que por años ha sido atraída por la mano de obra salvadoreña debido al nivel de fluidez de sus colaboradores, quienes son reclutados con una base del 75 % de conversación, comprensión y lectura, y que luego son capacitados por ellos mismos.
«Una de las ventajas que tenemos es la fluidez en el idioma, ya sea inglés, francés, portugués, entre otros, que hace más competitiva a nuestra mano de obra, por lo que se genera una demanda que muchas veces no es alcanzada por la falta de personal capacitado», acotó la especialista de la autónoma.
En el país, el sector de tercerización de servicios contabiliza un total de 88 «call centers» en los que se emplea de forma directa a más de 29,500 personas, lo que representa una tasa de crecimiento anual de 9 %.
Los SED en El Salvador experimentan cada vez más demanda debido a los servicios que prestan las compañías de tercerización a las poderosas multinacionales desde el país, con resultados que se convierten en excepcionales en los indicadores clave de desempeño (KPI, por sus siglas en inglés) de la industria.
«Necesitamos a más personas bilingües para llenar más plazas; nuestros servicios son exportados a una gran variedad de países. Tenemos “call centers” con inversiones de Estados Unidos, Canadá, Francia, España e India, y esto significa que lo hacemos bien», añadió la especialista.
Entre los «call centers» más grandes que operan en El Salvador se encuentran Teleperformance, Sykes, Concentrix, Telus International y Atento, con una fuerza laboral que oscila entre los 2,500 a 3,500 colaboradores.
Por su parte, René Rubio, director de Operaciones de Teleperformance El Salvador y Guatemala, señaló que durante la pandemia reclutaron a más de 2,000 colaboradores por trimestre, lo que impulsa un crecimiento del 40 % en relación con 2020, «esto nos Teleperformance apuesta por seguir creciendo y ser creador de espacios que apoyen el desarrollo de todos los colaboradores que trabajan bajo la modalidad remota.
«En febrero inauguramos el primer Cloud Campus Hub, en Santa Tecla, donde apoyamos a 1,100 empleados que trabajan desde sus casas y brindan soporte para clientes de la industria del entretenimiento y las telecomunicaciones», dijo Rubio.convierte en una fuente imparable de empleo para los salvadoreños que dominen el inglés».
VENTAJAS DE LOS «CALL CENTERS»
Quienes deseen emplearse en un centro de llamadas deben tener en cuenta que los salarios promedios van desde los $720, además de incentivos, claro que deben ser bilingües en un 75 % en inglés, francés, portugués, entre otros; para quienes hablan una tercera lengua, a su salario le incrementan un 25 %, esto aplica para los centros de contacto, añadió Bukele.
Por ello, los «call centers» se convierten en una opción atractiva para los estudiantes universitarios y hasta para los profesionales, más en este tiempo de crisis económica por la COVID-19. «En esta época, los segmentos más demandados son los servicios de “delivery”, telecomunicaciones y banca», añadió la especialista de Proesa.
El Salvador está empezando a incursionar en los servicios de tecnologías de información (ITO), específicamente en desarrollo de «software», desarrollo de aplicaciones, desarrollo de contenido y administración e infraestructura de IT. Aunque los retos del sector son muchos, priman las oportunidades, por ello Proesa trabaja de la mano con empresas que se dedican a la especialización del talento salvadoreño para la atracción de inversionistas.
«La temática de especialización en las ITO se está abordando con el Ministerio de Educación para modificar el pénsum de algunas carreras e incluir lo más demandado, como inglés y lenguaje de programación», añadió la especialista de Proesa.