Los tiempos de muestreo y respuesta que el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) les practica a los lácteos importados que ingresan por la frontera El Amatillo, en Pasaquina, La Unión, serán reducidos a partir del próximo mes.
El anuncio fue hecho ayer por el titular del MAG, David Martínez, quien llevó a cabo una inspección, junto con personal del Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (Oirsa), en el plantel de toma de muestras a los lácteos en el sector fronterizo, donde ingresan furgones con productos provenientes de Honduras y Nicaragua.
«Creemos que vamos a ser 10 veces más ágiles en todo lo que vamos a hacer a partir de febrero.Vamos a comenzar a muestrear de lunes a domingo. Las respuestas van a ser mucho más rápidas y nos vamos a apoyar en Oirsa para que la operación sea mucho más ágil», apuntó el titular del MAG.
Para estandarizar y dinamizar el proceso, el MAG prevé implementar laboratorios móviles en la frontera, aumentar el personal del área de muestreo y ampliar el tipo de exámenes y los metales que usan para los análisis.
Actualmente, la toma de exámenes por cada furgón tarda más de cuatro horas y únicamente se hacen muestreos dos días a la semana, lo que también ha causado que los períodos de espera de resultados se extiendan más de ocho días.
Tras la visita, el funcionario descartó que la especulación de precios en los productos derivados de la leche se deba a retrasos en los muestreos y que se haya limitado importación desde Nicaragua, por lo que también la Defensoría del Consumidor inició ayer una serie de inspecciones en las ventas de lácteos de diferentes mercados de la zona oriental.
El primer recorrido fue en el mercado de Santa Rosa de Lima, en La Unión, donde el ministro Martínez y el presidente de la Defensoría, Ricardo Salazar, constataron la existencia de productos y que la especulación de precios podría estar asociada a otras causas, las cuales serán determinadas en la investigación.