En el Reino Unido, el número de «pubs» desciende cada año y, en algunas regiones, hasta dos de esos lugares icónicos donde los británicos se juntan en general a tomar una pinta de cerveza, desaparecen al día.
«Dos pubs por día desaparecen en Gales e Inglaterra», titulaba el sitio de la BBC en septiembre, explicando que 383 habían sido demolidos o reconvertidos para otros usos en la primera mitad del año.
Según la British Beer and Pub Association (BBPA), en 2000 había 60.000 en el país. Desde entonces, la cifra ha ido menguando hasta llegar a 45.800 en 2022. Y será menor cuando termine 2023.
«Con suerte, en algún momento la disminución se estabilizará cuando nos acerquemos al número mínimo de pubs necesarios para satisfacer la demanda en cada área», explica, a la AFP, Nick Fish, que se ocupa de las estadísticas de la BBPA.
«La pandemia y la crisis energética han puesto a nuestros pubs bajo más presión que nunca», afirma la asociación en su sitio internet.
A Paul Richard Jennings, historiador y exprofesor jubilado de la universidad de Bradford, no le sorprende que el número se haya reducido, aunque señala que «no creo que vayan a desaparecer».
«Se bebe menos al haber muchas otras formas de gastar el tiempo libre y el dinero», explica a la AFP el autor de obras como «The local, a history of the English pub» o «A history of drink and the English».
– Mayor número en siglo XIX –
«Y en el siglo XX se produjeron cambios urbanos masivos cuando se demolieron barrios marginales y con ellos muchos ‘pubs’», añade, recordando que «en 1869, había 118.499 en Inglaterra y Gales. Un siglo después, en 1971, existían 64.087».
«Ahora hay otros locales para beber y mucha gente va al supermercado y bebe en casa, al pagar menos que en un ‘pub’», afirma.
«Los costes de funcionamiento de un ‘pub’ han aumentado constantemente. Y los incrementos del costo de vida han hecho que la gente gaste menos en ‘pubs'», añade.
Pete Brown, uno de los autores con más libros publicados sobre «pubs», piensa que la sociedad es cada vez más saludable.
«La gente bebe menos y ahora hay más opciones de ocio. Los ‘pubs’ estuvieron en su apogeo cuando nuestras casas no eran espacios agradables para pasar el tiempo», explica a la AFP el autor de «The Pub, a cultural institution» o «Man walks into a pub».
«Aproximadamente la mitad de los ‘pubs’ pertenecen a inmobiliarias que si creen que generarán más dinero como supermercado o bloques de apartamentos, los venderán», añade.
«Pero nunca desaparecerán por completo. Son parte de la identidad británica. Tendremos menos, pero aun así los amaremos», concluye Brown.
Además, se han convertido en un atractivo turístico y 36 de ellos están clasificados como monumentos por la National Trust, organización británica de conservación del patrimonio.
– Atractivo turístico –
Y dentro de ese mundo turístico, existen empresas, como Liquid History Tours, dedicadas a visitas a «pubs».
«Es posible que tengan que modificar la forma en que se ofrecen al mundo cambiante que lo rodea, pero siempre habrá un lugar para un ‘pub’ clásico. ¿Qué sería de Londres sin ellos?”, afirma John Warland, director de la empresa.
En 1393, el rey Ricardo II de Inglaterra obligó a los propietarios de los locales a colocar carteles a su entrada.
«Al estar al aire libre, las señales no duran mucho, aunque ocasionalmente se guardan algunas en los museos», explica, a la AFP, Dorothy Nicolle, autora del libro «All about pub signs».
Si las señales se colgaron desde el siglo XIV, la denominación «pub» llegó después.
«Ese término entró a mediados del XIX como abreviatura de ‘public house’, que a su vez se utilizó por primera vez a finales del XVII», explica Jennings.
Varios «pubs» presumen de ser el más antiguo del Reino Unido, aunque en Londres, entre los 3,500 de la capital, varios expertos dan ese título honorífico a The Prospect of Whitby, que data de 1520.
Ese «pub», y otros como The Grapes y George Inn, nombrados en obras de Charles Dickens, son monumentos de la capital.