Con el decomiso de 1.4 toneladas de cocaína, con un valor de más $35 millones, el Gobierno del presidente Nayib Bukele asestó un nuevo golpe al tráfico internacional de drogas, luego de interceptar dos lanchas 490 millas náuticas al sur del puerto de Acajutla, en Sonsonate, aproximadamente a 900 kilómetros de la costa salvadoreña, detallaron las autoridades de Seguridad.
La intercepción de las naves fue hecha por la Fuerza Naval salvadoreña, que logró, además, la captura de seis extranjeros.
El ministro de la Defensa, René Merino Monroy, destacó que con esta intervención El Salvador se convierte en el único país del istmo centroamericano en hacer esta intervención a dicha distancia, que supera los 900 kilómetros de la costa.
«Hemos logrado una incautación récord de nuestro país, ya que se convierte en la incautación más lejana que hemos hecho en la costa salvadoreña. La incautación se hizo a 490 millas náuticas, estos son 907 kilómetros», detalló.
La intervención de las dos lanchas se dio cuando estaban transbordando la droga desde una lancha que venía de Sudamérica a otra que continuaría su viaje hasta Norteamérica.
Los extranjeros detenidos son dos ecuatorianos y un colombiano, quienes viajaban en la primera lancha, y tres mexicanos que se transportaban en la segunda, los cuales serán acusados del delito de tráfico internacional de drogas.
El ministro de Seguridad, Gustavo Villatoro, señaló que el trabajo integrado entre las instituciones de seguridad permitió dar este nuevo golpe a estructuras internacionales de traficantes, el segundo en menos de 15 días.
«Si bien es cierto que este decomiso se da en aguas internacionales, el combate a la narcoactividad es una responsabilidad de todos los países que estamos en esas vías de tránsito. Este es un aporte del Estado de El Salvador a esa comunidad internacional en el combate a la narcoactividad», dijo Villatoro.
El fiscal general de la república, Rodolfo Delgado, detalló que la justicia salvadoreña puede procesar a las personas que sean capturadas en estas circunstancias, y recordó que otros tres extranjeros capturados la semana pasada en situaciones similares ya están en prisión en el país.
«En este caso lo que se está dando es la aplicación de la ley penal salvadoreña, la cual puede ser aplicable en cualquier parte del mundo, siempre y cuando lesione bienes jurídicos protegidos a nivel internacional, como lo es la salud pública», indicó.