La Fiscalía General de la República (FGR) presentó la solicitud ante los Juzgados Especializados de Santa Ana para que 256 pandilleros que operaban en la zona occidental del país permanezcan detenidos mientras continúan las investigaciones.
El ministerio público explicó que los criminales fueron capturados bajo las medidas del Régimen de Excepción. Entre los procesados se encuentran tres mareros que ordenaban asesinatos y que pertenecen a diferentes pandillas que delinquen en Santa Ana y 4 palabreros de estructuras de Ahuachapán.
Hasta el pasado 13 de abril, los juzgados especializados de instrucción habían resuelto que 2,700 pandilleros detenidos durante el régimen de excepción continúen en los penales a donde fueron trasladados tras ser capturados por pertenecer a maras o colaborar con ellos y cometer otros delitos.
En sus resoluciones, los jueces han accedido en un 100% a la pretensión de la Fiscalía que al momento de presentar las acusaciones solicitó que los mareros siguieran en prisión, solo dos personas fueron puestas en libertad a petición del ministerio público ya que se verificó que no eran miembros de pandillas.
Entre las últimas acciones que la Fiscalía ha efectuado está la acusación en contra de 132 mareros en el Juzgado Especializado de Instrucción 1A de San Miguel. «Esta solicitud de imposición de medidas corresponde al segundo grupo de personas detenidas dentro del régimen de excepción que establece el decreto 333», explicó uno de los fiscales, que acudió este miércoles a presentar el escrito de inicio del proceso penal.
Los mareros son acusados por el delito de agrupaciones ilícitas reformado por la Asamblea Legislativa y que sanciona con prisión de 20 y 30 años, así como 40 y 45 años para los cabecillas; además, les atribuyen tenencia ilegal de armas de fuego, tenencia y posesión de droga.