El aumento de demanda de pacientes con COVID-19 desde la semana pasada generó escasez de fármacos en la red hospitalaria pública de Guatemala. El Ministerio de Salud informó el martes pasado que se están quedando sin analgésicos y sedantes. Los insumos son indispensables para intubar a pacientes críticos con coronavirus. A esto se suma la falta de presupuesto para hacer frente a la pandemia.
«La crítica situación a la que ha dado lugar la pandemia nos obligó a generar un sistema de préstamos de medicinas en un movimiento colaborativo entre hospitales. Sin embargo, el elevado número de contagiados que mantiene saturadas las áreas de la COVID-19 en todas las instalaciones públicas ha debilitado este ensayo que venía siendo “exitoso”», detalló el ministerio en un comunicado.
«Tampoco tenemos presupuesto como el año pasado, cuando el dinero estaba casi que exclusivo para atender casos de la COVID-19», añadió.
Ante el pronunciamiento, el Laboratorio de Datos criticó que el ministerio no debería «sortear cada obstáculo, sino prever y planificar». Asimismo, señaló que la falta de pago a profesionales de salud y el desabastecimiento de hospitales «cuesta vidas». El laboratorio también ha criticado la lentitud con la que se desarrolla la campaña de vacunación. Guatemala trata de sobrevivir con el registro diario de más de 1,300 nuevos casos sin establecer más restricciones. El balance llegó a 263,836 contagios a escala nacional hasta el 7 de junio. Además, reportó 8,331 decesos. La tasa de mortalidad por cada 100,000 habitantes se elevó a 49.4.
El presidente Alejandro Giammattei reconoció que están próximos a sumergirse en una tercera o cuarta ola pandémica.
La directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Carissa Etienne, mencionó a Guatemala como uno de los países con más infecciones en la última semana, en la conferencia de actualización de estadísticas en Latinoamérica.
Los hospitales nacionales y temporales también sobrepasan el 100 % de su capacidad en los servicios para pacientes con coronavirus. El Ministerio de Salud declaró alerta roja hospitalaria por el alza de casos desde el 21 de abril.