El asesor jurídico de la presidencia de la república, Javier Argueta, explicó que el pago de sobresueldos en las últimas seis administraciones tuvo como fuentes de financiamiento la partida de gastos reservados y los excedentes presupuestarios de carteras de Estado transferidos a Casa Presidencial.
«En el caso de los sobresueldos son dos mecanismos que tenían para destinar fondos a sus personas que hacían gobernabilidad, a sus ONG y a los partidos políticos», reveló Argueta para luego detallar el mecanismo usado para el pago de los sobresueldos.
«¿Cómo era ese mecanismo? La Asamblea Legislativa asignaba un presupuesto específico al Órgano Ejecutivo, pero ese presupuesto específico era para gastos reservados y eso estableció una partida secreta [para el pago de los sobresueldos]», dijo.
El otro mecanismo fue que «todos los excedentes de la no ejecución presupuestaria que tenían los ministerios pasaban a la partida secreta [de Casa Presidencial]», explicó Argueta.
El funcionario dijo que quien decidía la reasignación de ese dinero de forma privada o en efectivo era el presidente, el secretario privado y otros funcionarios. Argueta añadió que la partida de gastos reservados destinada al Organismo de Inteligencia del Estado (OIE) sirvió para el pago de sobresueldos.
«Esos gastos reservados debían ser [por la naturaleza de trabajo] para el OIE, pero lo que menos hacían era darle dinero al OIE y ese dinero se quedaba en Casa Presidencial y, amparándose en la ley del Organismo de Inteligencia del Estado, decidían a quién darle dinero», dijo.
Argueta recordó que en 2010 la Sala de lo Constitucional prohibió las transferencias de recursos desde ministerios hacia el presupuesto de Casa Presidencial; sin embargo, se continuaron haciendo en las dos últimas administraciones. Por lo tanto, la comisión especial deberá llamar a personas para establecer el andamiaje en el pago de los sobresueldos.
Además del pago en efectivo, algunos exfuncionarios también recibieron pagos en especies. «Era grande la bolsa», explicó Argueta. Con la creación de la comisión especial, el funcionario afirmó: «Aunque la corrupción ha sido sumamente galopante, sumamente fuerte, se abren las puertas para comenzar a eliminar la impunidad que había existido durante las últimas tres décadas».