En la selección nacional mayor femenina de El Salvador lo que sobra en este momento, a pesar de dos derrotas al hilo en fase de grupos de Copa Oro ante Canadá y Costa Rica, es ilusión, fe y esperanza de que pueden dar una sorpresa en el juego de este miércoles ante Paraguay.
Las matemáticas todavía están del lado del equipo nacional, pero para eso debe dar un giro de 180 grados y empezar a meter goles y ganar. Dos ítems que por ahora son una deuda en este torneo de la Concacaf.
Éric Acuña, seleccionador nacional, declaró que «estamos aspirando más al segundo que al tercer lugar, por varios emparejamientos que hemos hecho. Me sigue pareciendo inadecuado de cómo se ha catalogado la participación, porque si ganamos mañana (hoy), van a haber tres equipos en el grupo con los mismos puntos, entonces no sé por qué no aparear de una u otra manera las participaciones».
El objetivo es claro en la Azul y para el entrenador. Se necesita meter muchos goles ante Paraguay y que Costa Rica reciba muchos de Canadá. «Voy a continuar con la idea de que mí equipo levante anímicamente y que exprese la idea que queremos. Quiero que El Salvador exprese en los juegos lo que expresa en los entrenamientos», agregó Acuña.
«Las aspiraciones están ahí, están difíciles, pero el fútbol es así de lindo. Hay que esperar los resultados mañana y nosotros jugar lo mejor posible para tratar de acceder. Si no, para mí, sacar el resultado va a ser suficiente de tener los mismos puntos que equipos que tienen muchísimos años más de trabajar con su selección», subrayó el timonel de la Selecta.
Para el choque ante las suramericanas, el timonel nacional también confirmó que hay bajas confirmadas, pero no adelantó nombres. Lo que sí señaló es que Samaria Gómez, Victoria Sánchez, Priscila Ortiz y Brenda Cerén acarrean sendas lesiones que les impedirán jugar. «Pero las jugadoras que van a entrar tienen la misma ponderancia, todas están calificadas para jugar estos partidos», destacó el técnico.