La pesca continúa siendo una gran «manzana de la discordia» en las discusiones posbrexit, declaró este domingo el ministro de Exteriores británico, Dominic Raab, en medio de una fase crítica en las negociaciones.
«Creo que la nuestra es una posición razonable, hay que encontrar un acuerdo», indicó a la cadena Sky News, señalando «un progreso hacia un mayor respeto a la posición del Reino Unido».
Pero, la pesca es la «manzana de la discordia» mayor, destacó, repitiendo que, en tanto «Estado costero independiente», el Reino Unido debe «controlar sus aguas».
Las discusiones se reanudan este domingo entre los negociadores europeo y británico, Michel Barnier y David Frost, respectivamente.
«El trabajo continúa, inclusive en domingo», había dicho Barnier más temprano a los periodistas.
Apenas quedan unos días a Londres y Bruselas para tratar de concluir un tratado de libre comercio que pueda entrar en vigencia el próximo 1 de enero, al finalizar el periodo de transición que comenzó el pasado 31 de enero, fecha oficial del Brexit.
Ante una eventual falta de acuerdo en este plazo, el comercio se regiría de acuerdo con las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC), lo que es sinónimo de cuotas y aranceles aduaneros. Este escenario expondría a ambas partes a un nuevo ‘shock’ económico, que se añadiría al provocado por la pandemia de la COVID-19.
De acuerdo con fuentes europeas, Barnier propuso que la Unión Europea (UE), restituya entre el 15 % y el 18 % del total de la cuota europea de pesca en aguas británicas y, de manera simétrica, se haga lo mismo con la cuota de los británicos para pescar en el océano Atlántico y en el golfo de Vizcaya.
Las discusiones cara a cara fueron reanudadas el sábado, después de que el negociador europeo tuviera que aislarse unos días a causa de un caso de la COVID-19.