Las hermosas playas, una variada gastronomía con todos los productos marinos frescos y los espectaculares paisajes en el amanecer y el atardecer son parte de las maravillas turísticas que se disfrutan al recorrer el golfo de Fonseca y sus islas en La Unión.
Quienes visitan esta atractiva zona turística, situada a más de 200 kilómetros de distancia de la capital, coinciden en que se requieren de al menos dos días para disfrutar y apreciar plenamente de todas las maravillas que se esconden en esta zona.
Al llegar a La Unión, a pocos minutos de la ciudad, los turistas encuentran las playas Punta Chiquirín y Playitas que ofrecen una vista panorámica del golfo, al mismo tiempo pueden apreciar el imponente volcán de Conchagua. Desde estos lugares, los turistas se pueden embarcar para navegar las aguas del golfo y apreciar las islas.
«Nosotros los llevamos a que conozcan las islas Meanguera del Golfo, Conchagüita, Martín Pérez, y luego a comer a los restaurantes de La Playona, en la isla Zacatillo. Lo más impresionante y lo que más les gusta a los turistas es cuando vamos a la isla de Los Pájaros y ahí vemos las lanchas pescando, sacando camarón, peces y todos los productos marinos que aquí se sacan», manifestó Candelario García, guía turístico.
En las islas del interior del golfo también hay playas que no han sido muy exploradas y que son poco conocidas a escala nacional. Una de ellas es la playa de Guerrero o Majahual, en la isla de Meanguera del Golfo; y en la isla de Conchagüita se disfruta de playa Brava; y de La Playona, en la isla Zacatillo. En todas, los turistas pueden aprovechar para darse un baño.
A raíz del crecimiento del rubro turístico en la zona, muchas personas se han capacitado como guías turísticos y turoperadores para dar una mejor atención a los turistas nacionales y extranjeros que llegan en mayor cantidad para las temporadas de vacaciones.
En estos lugares también hay restaurantes que ofrecen una variedad de platillos elaborados con productos marinos frescos, que en su mayoría se extraen del golfo y de la zona costera de este departamento. En el caso de Playitas, el plato popular y tradicional es la mariscada. «Normalmente lo que más vienen buscando los clientes es la mariscada y también la langosta rellena de camaroncillos; también les tenemos filete de pescado con camaroncillos y el pescado tradicional. Y para quienes prefieren otros platos que no sean mariscos, también les tenemos carnes», dijo Évelin Blanco, que trabaja en uno de los restaurantes a orillas de Playitas.
Una de las peculiaridades del sitio, por su cercanía con el volcán de Conchagua, son los ausoles que se encuentran a orillas de las aguas; un área privada con grietas desde las que emana agua con elevadas temperaturas y con olor a azufre.