El rey Carlos III y su esposa, la reina Camila, visitarán del 20 al 22 de septiembre Francia, una visita que estaba prevista inicialmente en marzo, pero que las manifestaciones contra una impopular reforma de las pensiones de Macron obligó a retrasar.
A una semana del viaje real, el Palacio del Elíseo, sede de la presidencia francesa, detalló el programa del viaje, que incluye que ambos jefes de Estados, junto a sus esposas, participen en una ceremonia el miércoles poco antes de las 15H00 (13H00 GMT) ante la llama del soldado desconocido, bajo el Arco del Triunfo.
A continuación, las dos parejas descenderán la turística y reputada avenida de los Campos Elíseos, antes de un encuentro entre Macron y Carlos III sobre la biodiversidad, el clima, la inteligencia artificial, Ucrania y el Sahel.
La jornada del miércoles la coronará una cena de Estado en el Palacio de Versalles, en forma de «guiño a la reina Isabel II», fallecida hace un año y quien visitó en varias ocasiones a este símbolo de la desparecida monarquía francesa, precisó el Elíseo.
La reina y sus esposo, el príncipe Felipe, almorzaron en la galería de los Espejos, a invitación del entonces presidente René Coty, durante su primera visita de Estado a Francia en 1957. La soberana volvió a Versalles en 1972.
Carlos III es «sensible a la idea de poder seguir los pasos de su madre», apuntó el Elíseo.
Emmanuel Macron recuperó Versalles como una carta de visita diplomática, muy usada por el general Charles de Gaulle, y acogió en este palacio a su par ruso, Vladimir Putin, en mayo de 2017, e incluso una cumbre europea en marzo de 2022, entre otros.
La cena en esta galería barroca, destinada en sus inicios a mostrar el poder del monarca absoluto Luis XIV, contará con entre 150 y 180 invitados.
En la agenda de la visita también figura que Macron y Carlos III visiten el jueves las obras de restauración de la catedral de Notre Dame.
