Los primeros autocines de El Salvador operaron allá por la década de los ochenta, siendo una de las grandes novedades de esa época.
En ese entonces, los clientes tenían que sintonizar la radio en frecuencia AM para escuchar el audio de la película; otra opción era hacerlo por medio de un parlante que se colgaba en la ventana del conductor.
Aunque la tecnología no era avanzada, muchos salvadoreños de esa época tuvieron la oportunidad de vivir una moda cinematográfica que cobró auge entre los años cincuenta y sesenta en Estados Unidos.
Los «cine-cars», como también les llamaba, operaron en el Paseo Escalón y el bulevar de Los Héroes. Se cree que cerraron por la crisis política que vivió el país en ese entonces.

Muchos años pasaron para que el autocinema renaciera como una forma de entretenimiento para las familias. Y fue precisamente, la cuarentena impuesta por la pandemia la que motivó a algunos empresarios a cambiar el giro del negocio y lanzarse al rubro cinematográfico.
Una de esas opciones es Autocinema Hollywood, una empresa que nació en octubre pasado, casi que obligada por la COVID-19, para que las familias salvadoreñas siguieran disfrutando del cine, pero con la aplicación de celosos protocolos de bioseguridad.
La plataforma cinematográfica funciona en el parqueo del estadio Cuscatlán, en San Salvador, y presenta géneros de terror, suspenso, comedia y musicales, entre otros.
El precio de entrada es de $10 por vehículo, pero los usuarios pueden acceder a descuentos al pagar con tarjetas de crédito de bancos asociados.

«Tenemos capacidad para 120 vehículos y nos visitan entre 35 y 40 carros diarios», contó José Roberto Búcaro, director comercial de Autocinema Hollywood.
La cantidad de vehículos que ingresa genera una ganancia de unos $350 diarios. Lo anterior significa que la cifra de ventas superará los $100,000 por año. El cine ofrece una función martes y jueves; viernes, sábado y domingo son dos.
La empresa es reciente pero planea abrir más sucursales. La próxima es en San Miguel, una tarea que le tomará un tiempo, pues antes capacitará al personal.
«Por la cuarentena era necesario salir a entretenerse. Desde la comodidad de mi automóvil, de forma segura y tomando las medidas de prevención, hay opción de vivir un ambiente diferente», celebró Alejandra Bonilla, una espectadora amante del autocine.
De acuerdo con la programación, este mes se presentarán «El principito» y «Los increíbles», en el género infantil; «Shazam», «Malasaña» y «La monja» para todo público; y «La Llorona» para los adeptos al género de terror.

El Autocinema Hollywood cuenta además con un «snack bar» que recibe las órdenes por WhatsApp o por código QR, según la numeración facilitada por el personal.
La iniciativa ha permitido que los jóvenes conozcan esta nueva modalidad y disfruten del cine sin bajar de su auto, tal como lo han visto en algunas películas ambientadas en las décadas de 1940 y 1960.
Cabe destacar que en agosto pasado, la alcaldía de San Salvador junto con la empresa privada lanzaron el proyecto Parking Live, un autocinema que funcionó en el Parque Bicentenario, para entretenimiento de la familia.
Una iniciativa similar es la que puso en marcha La Pampa El Volcán, durante los meses más fuertes del confinamiento. Se trató del montaje de una pantalla en el área de estacionamiento, un espacio para que las familias salvadoreñas disfrutaran de una buena película desde la comodidad de sus vehículos. La iniciativa fue suspendida una vez se normalizaron las operaciones del restaurante.