Marco Rubio, influyente senador republicano por el estado de la Florida, Estados Unidos, volvió a endosar su respaldo al combate a las pandillas que impulsa el presidente Nayib Bukele, a la vez que condenó los ataques de los activistas del Partido Demócrata y las sanciones impuestas por la administración presidencial de Joe Biden en contra de los funcionarios del Gobierno salvadoreño que trabajan en la lucha contra los grupos delincuenciales.
El senador plasmó estos planteamientos en el artículo de opinión que escribió y publicó en la revista en línea «Compact Mag», en la que contrastó que los salvadoreños — en los gobiernos anteriores— fueron víctimas de las pandillas, extorsiones y homicidios, pero que esta situación comenzó a cambiar luego del fortalecimiento de las medidas de seguridad por parte del presidente Nayib Bukele, con la implementación del régimen de excepción, vigente desde el 27 de marzo de 2022.
«Sin embargo, todo esto no ha impresionado a la administración de Biden. Lejos de respaldar a Bukele, la Casa Blanca ha sancionado a miembros clave de su Gobierno. Eso no debería sorprender, dado que los activistas del Partido Demócrata, las mismas personas que glorifican al asesino en masa Fidel Castro, ahora hablan mal de El Salvador como una dictadura emergente y un bastión del “antiliberalismo”. La medida revela cómo la ideología, no la democracia, está impulsando a los izquierdistas estadounidenses y al presidente en deuda con ellos», escribió Rubio.
De igual manera, reconoció que Nayib Bukele fue electo democráticamente en las urnas y ha trabajado coordinadamente con la Asamblea Legislativa —con mayoría de Nuevas Ideas— para fortalecer el combate a las pandillas, lo que ha permitido «devolverles la libertad a los salvadoreños», que ahora sí pueden salir a las calles sin temor a ser víctimas de las pandillas.
Ayer, el mandatario salvadoreño reafirmó el buen clima de seguridad que hay en El Salvador al reportar que el 16 de abril pasado cerró sin homicidios a escala nacional, y señaló que la comunidad internacional fue incapaz de resolver los problemas de seguridad que sufrieron los salvadoreños honrados en los gobiernos anteriores.
A pesar de estos resultados en la seguridad pública, la izquierda estadounidense —según Rubio— «es tan alérgica a la aplicación de la ley que preferiría ver al Barrio 18 y la MS-13 deambulando por las calles que criminales encerrados […]. Es hipócrita, porque los demócratas no tuvieron ningún problema en usar los poderes de emergencia para cerrar toda la economía durante la pandemia».
Al igual que a finales del mes pasado, el senador lamentó la política exterior que tiene Joe Biden en contra de El Salvador, al cual definió como país aliado en la región.
«Es simplemente un llamado a inyectar algo de sentido común en nuestro trato a las naciones amigas. El presidente Biden parece pensar que puede sermonear y sancionar a quien quiera sin detrimento de nuestra propia seguridad nacional. No podría estar más lejos de la verdad», concluyó.