El Gobierno del presidente Nayib Bukele y la bancada de Nuevas Ideas siguen apostando por el buen desarrollo de la primera infancia, generando las mejores condiciones para la madre y su hijo lactante, binomio que en el pasado careció de la protección y el estímulo de los vínculos tempranos, y de una nutrición segura y suficiente, pues nunca fueron ejecutadas verdaderas políticas estatales para el fomento, la protección y el apoyo a la lactancia materna.
La nueva Asamblea Legislativa ha comenzado a darle vida al mandato constitucional que reconoce a la persona humana como el origen y el fin de la actividad del Estado, a la que la Carta Magna también le mandata crear toda una institucionalidad para la protección de la maternidad y la infancia.
Es así como el parlamento, impulsado por iniciativas presentadas por el despacho de la primera dama Gabriela de Bukele, ha aprobado la Ley Nacer con Cariño para un Parto Respetado y un Cuidado Cariñoso y Sensible para el Recién Nacido y la Ley Crecer Juntos para la Protección Integral de la Primera Infancia, Niñez y Adolescencia.
A estas dos normativas se suma la recién aprobada Ley Amor Convertido en Alimento para el Fomento, la Protección y el Apoyo a la Lactancia Materna, que garantiza las condiciones para priorizar este derecho del bebé en sus primeros 1,000 días de vida. Esta norma también fue impulsada por el despacho de la primera dama.
Con estos tres cuerpos legales, El Salvador está en sintonía con tratados y convenciones internaciones que «establecen obligaciones para los Estados parte, a fin de crear la legislación que proteja y garantice los derechos de los niños y de las mujeres, en todas sus esferas».
La comisión de familia del congreso, en su dictamen favorable para el decreto que desarrolla la nueva legislación, reconoce que «representa un avance importante en la protección de los derechos de la primera infancia, la niñez, la mujer y las familias».
Asimismo, sostiene que «el no tener la nutrición adecuada durante las primeras etapas del ciclo de vida puede conducir al incremento de enfermedades y de la mortalidad en la niñez».