Un total de ocho municipios del país que se encuentran en la zona trinacional Plan Trifinio (Guatemala, El Salvador y Honduras) se están beneficiando con el programa de seguridad alimentaria y nutricional que impulsa el vicepresidente de la república, Félix Ulloa, y el cual ha dado importantes resultados para más de 100 familias de escasos recursos.
El plan se ha ejecutado con éxito y numerosas familias de ocho municipios de esa región en El Salvador ya cosechan sus propios alimentos. La meta es que los beneficiarios produzcan para la comercialización.
«El hambre ha sido una de las debilidades que han tenido las comunidades en el mundo entero, y con esta pandemia esto se agudiza. Ahora son retos para quienes tenemos la responsabilidad de trabajar en función de nuestros pueblos». Expresó el vicemandatario Ulloa.
El programa Región Trifinio El Salvador, presentado por el vicepresidente Ulloa el pasado 14 de junio, contempla la reactivación económica y social pos-COVID-19, y tiene como meta desarrollar los sectores agropecuario, comercio, construcción y turismo, que son la mayor fuente de ingresos y empleos, con el objetivo de aprovechar todo su potencial.
Los ocho municipios que integran la región Trifinio El Salvador son Metapán, Masahuat, Santiago de la Frontera, San Antonio Pajonal y Santa Rosa Guachipilín, del departamento de Santa Ana; mientras que en Chalatenango están Citalá, San Ignacio y La Palma.
Desde que se dio a conocer el proyecto, a la fecha, los resultados han sido satisfactorios. Aunque falta mucho por desarrollarlos, varias agencias de cooperación, cuerpo diplomático, e incluso el vicepresidente de Guatemala, ya conocieron cómo un gran número de familias de esos ocho municipios han comenzado a transformar su vida.
«Hemos impulsado estos programas de seguridad alimentaria y nutricional. Pudimos comprobar que se está produciendo a nivel de subsistencia. Nuestra meta es incrementar la producción a una escala superior en la cual, además de suplir los alimentos nutritivos para las familias, se puedan generar productos extras para comercializarlos en los mercados y les genere ingresos adicionales a las familias», expresó el vicepresidente Félix Ulloa luego de recorrer la feria de alimentos orgánicos de 100 familias que producen sus propios alimentos para su consumo y venden sus excedentes.
Parte de la estrategia del Plan Trifinio El Salvador, en el marco de la pandemia, ha sido la creación del Consejo Económico y Social con el que se ha involucrado al sector público privado. «Particularmente en el tema de Metapán, [se ha formado] una alianza con la empresa Holcim y con AES [distribuidora de energía eléctrica]», con lo que se le ha dado un plus al desarrollo de las comunidades, dijeron los representantes de dichas empresas, Alfredo Vidal y Gregorio Trejo.
Eso significa que «nos va a permitir junto a las comunidades, el sector académico y la sociedad civil fortalecer las capacidades de la comunidad», explica por su parte Jorge Urbina, director ejecutivo nacional de Plan Trifinio El Salvador.
«Me siento bendecida por este proyecto, porque cultivar mis propios alimentos no solo me permite tener comida sana para mi familia y pasar más tiempo con ellos. También puedo vender y llevar dinero a mi hogar. Así ya no regreso a mi anterior trabajo de vendedora ambulante, el que tenía antes de la pandemia», explica Luz Marina de Oliva, una de las de beneficiarias.
A la fecha, hay más de 180 familias trabajando en huertos caseros. Con el apoyo de Holcim y la alcaldía de Metapán son 100, y más de 80 en San Antonio Pajonal; además, se abrirán otros 500 huertos en el resto de los municipios.
«Con este convenio se inicia un plan piloto de implementación de huertos caseros en beneficio de las familias. En un segundo momento nos concentraremos en la construcción y el desarrollo de invernaderos municipales, los cuales contribuirán a garantizar la seguridad alimentaria y nutricional en las comunidades. Estas acciones forman parte de la estrategia de desarrollo económico y social de la región Trifinio El Salvador». Jorge Enrique Martínez, director ejecutivo de Plan Trifinio El Salvador.
«Es bonito cultivar nuestros propios alimentos»
Los beneficiados de Metapán están satisfechos con los resultados del proyecto, ya que no solo les hace autosostenible su alimentación, sino que les permite hacer frente a la crisis generada por la pandemia.
Plan Trifinio El Salvador ha permitido a centenares de familias cambiar su condición de vida en cuanto a la seguridad alimentaria, ya que hoy están produciendo sus propios alimentos y comercian el excedente; además, contribuyen a cuidar el medioambiente. En Metapán, donde se tiene el apoyo de la empresa Holcim, se han desarrollado 180 huertos caseros.
«Es bonito cultivar nuestros propios alimentos con nuestras propias manos. Ya no hay necesidad de ir al mercado. Estamos produciendo lo que nos estamos alimentando y alimentando a otras personas de la comunidad, porque los productos que hemos vendido los hemos vendido acá, y sentimos el deseo de seguir», expresa Luz Marina de Oliva, una de las 180 beneficiadas del proyecto.
En la actualidad, a 180 familias de 18 comunidades de los municipios de Metapán y San Antonio Pajonal, en el departamento de Santa Ana, les han proporcionado 210 quintales de abono orgánico mineralizado, se les distribuyeron 7,850 plantines de tomate y 4,000 de lechuga, todo cultivado en Sistagro. También les entregaron semillas para sus hortalizas de ejote, rábanos, cilantro, pepino y pipián.
El proyecto de huertos caseros que impulsa Plan Trifinio fomenta la solidaridad en las comunidades, y mejora la práctica en la agricultura con el uso de insumos agroecológicos para el tratamiento de suelos, el fortalecimiento de cultivos y la contención de plagas, parte integral del acompañamiento y las capacitaciones que brindan a las familias para obtener los mejores cultivos en armonía con el medioambiente.
Otro de los proyectos que se ejecutan en algunos municipios que forman parte del Plan Trifinio El Salvador es el de gallinas ponedoras. Este tipo de emprendimientos contribuyen a generar una fuente alternativa de alimentos e ingresos familiares. Es un sistema de crianza de gallinas en el que se construyen módulos con las óptimas condiciones para que las gallinas produzcan huevos.