Tras el ataque armado de pandilleros a un agente de la Policía Nacional Civil (PNC) que le provocó la muerte, el presidente Nayib Bukele ordenó instalar un cerco de seguridad con 5,000 soldados y 500 policías, el cual se estableció ayer por la madrugada cuando las fuerzas del orden tomaron el control de Nueva Concepción, en el departamento de Chalatenango.
La operatividad policial y militar que inició desde la tarde del martes, tras el asesinato del agente Maximino Antonio Vásquez Rodríguez, de 52 años, ha dejado como resultado algunas capturas de criminales que forman parte de la Mara Salvatrucha, estructura terrorista responsable del asesinato.
El agente Vásquez Rodríguez tenía aproximadamente cinco años de estar destacado en dicha localidad. A raíz del hecho sangriento, las autoridades arrestaron a Francis Antonio Gómez Calderón, apodado Monkey o Mono, integrante de la clica Fulton Locos Salvatruchos (FLS). Tal como lo ordenó el mandatario, policías y soldados se instalaron en la entrada principal del municipio y en otros accesos o calles hacia cantones o caseríos en busca de pandilleros.
Los militares efectuaron registros en vehículos particulares, transporte colectivo y a motociclistas, así como en viviendas y a personas que se desplazaban por caminos vecinales. Tras darse a conocer la baja policial, el presidente Bukele advirtió: «Vamos a arrasar con estos malditos asesinos y sus colaboradores. Los meteremos en prisión y no saldrán jamás».
Al cierre de esta nota, las fuerzas del orden continuaban con la operatividad en busca de criminales, principalmente en el cantón El Zapote, sitio del ataque, y zonas aledañas.
«Ante el homicidio ocurrido ayer [el martes] de un agente de nuestra PNC por parte de pandilleros que aún se encuentran en algunos sectores de nuestro país escondidos, huyendo del régimen de excepción, desde esta madrugada [ayer] establecimos un cerco de seguridad alrededor del municipio de Nueva Concepción, en Chalatenango, con más de 5,000 elementos de la Fuerza Armada y 500 de la Policía Nacional Civil», publicó el mandatario en Twitter.
Bukele ha criticado a las ONG que no se pronuncian cuando asesinan a un agente policial o a personas honradas o trabajadoras, y tras la emboscada al policía, escribió: «Que sepan todas las ONG de «derechos humanos» que vamos a arrasar con estos malditos asesinos y sus colaboradores, los meteremos en prisión y no saldrán jamás». El mandatario agregó: «No nos importan sus reportajes lastimeros, sus periodistas prepago, sus políticos marionetas ni su famosa «comunidad internacional», que jamás se preocupó por nuestra gente. Sanaremos nuestro país y eliminaremos esta peste por completo. Llévense sus recetas fracasadas para otro lado».