El Juzgado Segundo de Instrucción de San Salvador desarrolló una audiencia especial de revisión de medidas al coronel Joaquín Arnoldo Cerna Flores, acusado por la Fiscalía General de cómplice del asesinato de seis sacerdotes jesuitas y dos de sus colaboradoras.
La diligencia fue a petición de sus defensores, el abogado Lisandro Quintanilla, quien dijo que el coronel es prófugo, pero que se ha pedido que se le levante la orden de captura y se le otorguen medidas alternas a la detención.
«Más que todo por razones de salud, de la edad y todas las complicaciones que tiene para enfrentar un proceso penal con detención provisional y considerando todos esos aspectos es que le hemos pedido medidas como las que gozan otros imputados», manifestó Quintanilla.
A Cerna Flores, quien fue jefe de Operaciones del Conjunto 3 del Estado Mayor, la Fiscalía lo acusa de asesinato ya que supuestamente participó en la reunión donde se decidió hacer el cateo en las instalaciones de la UCA y le ordenó al teniente José Ricardo Espinoza Guerra que lo ejecutara con el pretexto de que ahí se refugiaban grupos guerrilleros y había material subversivo, pero el objetivo era ubicar el lugar donde los jesuitas permanecían para ejecutar la masacre el 16 de noviembre del año 1989.
La causa penal está en la segunda etapa procesal en el Juzgado Segundo de Instrucción de San Salvador. El 12 de marzo de 2022, el Juzgado Tercero de Paz de San Salvador, ordenó la captura del expresidente de la República Alfredo Félix Cristiani Burkard, acusado de comisión por omisión en el delito de asesinato, del exdiputado Rodolfo Parker por fraude procesal y encubrimiento personal.
También tienen orden de captura, los coroneles Inocente Orlando Montano Morales, Joaquín Arnoldo Cerna Flores, Nelson Iván López López y Manuel Antonio Ermenegildo Rivas Mejía.