Firpo y FAS decidieron esperar hasta el final para definir el partido, que se jugó en la intimidad, debido a la sanción disciplinaria que pesa sobre los toros. Pero en ese marcador de 2-3 a favor de los asociados, hubo cuatro goles sobre el cierre del partido. Con esa pizarra a favor, los tigres llegan a 13 puntos para seguir en la mitad de la tabla.
Los dos equipos quedan en situación antagónica. Los asociados sonríen y los toros lamentan que deben seguir en la última casilla con 8 puntos. Aparte del castigo disciplinario, los toros deben recibir una bofetada desde lo deportivo.
Dinamismo
Firpo tuvo un buen arranque para iniciar el trámite de gol ante el arco de Kevin Carabantes. El volante Christopher Galeas recogió un balón en la entrada del área, contacto casi perfecto, pero el portero tigrillo le dijo que no con sus reflejos.
Luego fue el turno de FAS. A los 34 minutos, el argentino Guillermo Stradella probó con toque razo, cruzado, pero Rodrigo Rivera no llegó a tiempo en la barrida para el cierre.
Solo cuatro minutos más tarde, se fue expulsado el volante taurino, Jefferson Polío, por conducta antideportiva. Los toros tendrían que triplicar esfuerzos con uno menos por más de 45 minutos.
Firpo no iba a poder soportar tener uno menos en cancha. A los 52 minutos, el cafetero Jefferson Collazos fue certero en el cobro de un penalti para el 0-1 ante los locales.
Luego, FAS también se quedó con diez, al 61,tras la acumulación de tarjetas amarillas del zaguero Edson Meléndez. Así, Firpo pudo emparejar al 79 con un fuerte derechazo de Carlos Ortiz. Se tuvo toda la confianza para poner el 1-1.
Tres minutos después, Stiven Vázquez venció a Kevin Carabantes con un potente de derechazo para el 2-1.
Pero FAS no iba a dar el juego por perdido. Al 85, Landaverde culminó bien un pase de Bladimir Díaz, para salvar a los santanecos de una segunda caída al hilo, con el 2-2 que fue transitorio.
La visita tenía para más. A los 88 minutos, Wilma Torres aprovechó un balón que le dejó en bandeja de oro el guardameta pampero para poner el 2-3 definitivo.
Sobre el final, Vásquez mandó el balón a las redes, pero el réferi, Rubén Medrano, no convalidó, y los cartones no se movieron más.