Una de las estrategias para llegar a nuevos mercados, desarrollar nuevos productos y hacerse de más capital para impulsar el crecimiento es la aceleración. Se trata de implementar un proyecto transformador, para obtener resultados a corto plazo, mediante la utilización de herramientas, metodologías y conocimientos prácticos que hacen incrementar el proceso de innovación deseado de manera exponencial, intensa, apasionante y táctica.
La aceleración empresarial comprende el incremento en la velocidad para ejecutar acciones con el fin de cumplir los objetivos y estrategias de una empresa en un tiempo determinado. Esto incorpora acciones gerenciales para una acertada toma de decisiones en las áreas comerciales, administrativas, financieras, tecnológicas, de producción y de recursos humanos.
Una publicación del Observatorio Mype indica que este tipo de programas busca adelantarse a los escenarios futuros o nuevas realidades de los consumidores, identificación de nuevos mercados y reducción de la brecha entre sus competidores, logrando que se produzca una ventaja competitiva, mejorando los ingresos y revirtiendo tendencias hacia la obsolescencia. A continuación, se presenta una guía básica para abordar la aceleración en las empresas.
PASO 1. Visualizar el crecimiento
Para lograr el crecimiento esperado, se debe visualizar cómo afectará a la empresa dicha expansión. La mayoría de los empresarios parten de una idea borrosa de crecimiento: «Me gustaría duplicar las ventas». Sin embargo, lo que debe de preguntarse es ¿Qué tipo de empresa es la que realmente quiere? Cuanto más clara sea la visión, más probabilidades tendrán de lograrlo. La visión se debe traducir en metas y acciones estratégicas para que se vuelva una realidad. Además, contar con el personal adecuado, enfocar el negocio al cliente, adaptación a las tecnologías cambiantes, y focalizarse en el propio negocio y no en la competencia.
PASO 2: Planificar
Este es un paso importante para el éxito y crecimiento adecuado de una empresa, y es justo aquí donde muchos empresarios tropiezan. Lo importante de todo es comenzar a producir su nuevo producto o servicio y salir a vender sin una buena planeación, es decir, tomar decisiones con base a la información disponible, investigar lo que se requiere para alcanzar esa visión con rentabilidad, sobre la base de información financiera y del entorno. También debe definir un objetivo, establecer un cronograma, utilizar un software para hacer seguimiento y establecer métricas, entre otros.
PASO 3: Agilidad para actuar y tomar decisiones
Los empresarios que crecen más rápido y con mayor agilidad se reúnen con su equipo constantemente para tratar los temas prioritarios, revisar el avance en las métricas y discutir información obtenida del mercado. Esto lo realizan siguiendo un proceso ordenado y controlado para potenciar los recursos y oportunidades, tomando decisiones acertadas en base al análisis de información clara y precisa.
Algunos expertos aseguran que es importante tomar decisiones, generar oportunidades, fijar prioridades y criterios, y sobre todo hacerlo en función de lo que sea necesario e importante para el emprendimiento.
PASO 4: Innovación
Las empresas deben de innovar, es decir, buscar una diferenciación, que sea la propuesta de valor, la promesa que hace la empresa a sus clientes; se refiere a encontrar una ventaja superior a la competencia. En ese sentido, deben de mejorar en el servicio, en la atención al cliente, crear una página web y ampliar horarios, entre otros. La innovación implica permanecer alerta a la competencia y estudiar sus movimientos, poniendo la creatividad en marcha en función de solventar cada vez con mayor eficiencia y efectividad las necesidades del consumidor.