El Congreso de Estados Unidos acordó que $4.1 mil millones servirán para atender la emergencia en Ucrania y, aunque otros países también están en conflicto, los parlamentarios destinaron una única partida de $6.8 mil millones de asistencia humanitaria en otros territorios, como Afganistán y África, en un momento en el que el jefe de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), Filippo Grandi, llamó a que la operación militar en Ucrania no debe hacer que el mundo olvide el dolor de los afganos.
El presupuesto federal fue presentado en abril de 2021 por el presidente Joe Biden, con un monto inicial de $8.5 mil millones para asistencia humanitaria en países extranjeros. Sin embargo, el Congreso lo redujo este año a $6.8 mil millones, lo que implicó $1 mil millones menos en comparación al año fiscal de 2021.
Estados Unidos aprobó adicionalmente $800 millones para ayuda militar de Ucrania luego de una videoconferencia el miércoles pasado del Congreso con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski.
Aunque están vigilantes de la situación en Ucrania, Grandi señaló que los reflectores no solo se deben centrar en ese país, mientras que Afganistán, que cumplió siete meses desde la invasión de los talibanes por la abrupta retirada de las tropas estadounidenses, todavía requiere de ayuda humanitaria. Las declaraciones surgieron al culminar su visita en Afganistán entre el 14 y 15 de marzo.
«Mi mensaje al venir aquí es que no olviden otras situaciones donde se requiere atención y recursos y Afganistán es una de ellas», dijo durante su visita, de acuerdo con la agencia francesa de prensa. «Los riesgos de distracción son muy altos… La asistencia humanitaria debe seguir fluyendo sin importar cuantas otras crisis se presenten en el mundo y compitan con Afganistán», agregó.
El representante especial adjunto del Secretario General de la ONU para Afganistán, Ramiz Alakbarov, declaró que en «Afganistán se enfrenta una crisis de inseguridad alimentaria y malnutrición de proporciones sin precedentes».
En su informe detalló que las personas que padecen de hambre aguda pasaron de 14 millones en julio de 2021 [un mes antes de que los talibanes gobernaran] a 23 millones en marzo de 2022, esto «ha obligado a los hogares a recurrir a medidas desesperadas como saltarse comidas o contraer deudas para asegurar algo de comida al final del día».
El 95 % de la población no come lo suficiente, pero se eleva a casi al 100 % en los hogares encabezados por mujeres, comunicó Alakbarov. Esto también se refleja en las salas de hospitales que están llenas de niños, «muchos pesan al año lo que pesaría un bebé de seis meses en un país desarrollado, y algunos están tan débiles que no pueden moverse», cita el documento.
De acuerdo con Alakbarov, las tasas de desnutrición aguda en 28 de las 34 provincias son elevadas, con más de 3.5 millones de niños que necesitan apoyo para el tratamiento nutricional.
Descontento por reducción de paquete humanitario
La directora de política, presupuesto y asignaciones de la Coalición de Liderazgo Global de EE. UU., Lisa Peña, calificó el recorte de ayuda humanitaria como «desastrosa».
«Este proyecto de ley era insuficiente antes de que [el presidente ruso Vladimir] Putin incluso moviera sus tanques cerca de la frontera con Ucrania. Sabíamos que había aumentos en los precios de los alimentos y otros productos básicos antes del conflicto en Ucrania», dijo al medio de comunicación Roll Call.
EE.UU. congela fondos
La portavoz del Consejo de Seguridad Nacional estadounidense, Emily Horne, dijo en enero que Estados Unidos otorgaría más de $308 millones en asistencia humanitaria para Afganistán, sumando unos $782 millones desde octubre de 2021 para los refugiados.
Un mes después, el presidente Biden se apoderó de los fondos afganos depositados en instituciones financieras estadounidenses y fueron congelados por la llegada de los talibanes, para repartir $7,000 millones y compensar a las víctimas del ataque terrorista del 11 de septiembre de 2001 en EE. UU. y la crisis humanitaria en ese país. En su momento, las autoridades talibanas expresaron que reconsiderarían su política hacia Estados Unidos si no liberaba los fondos afganos, pero Biden no ha anunciado una nueva consideración.
OMS llama a invertir en atención a civiles
El director de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom, señaló durante la conferencia de actualización de la COVID-19 en el mundo que se están gastando «gran cantidad de dinero en armas» por el conflicto en Ucrania y Rusia, pero que solicitaban que los donantes invirtieran más en la atención de los civiles en lugar del equipo de combate.
GUERRA ETERNA EN OTROS PAÍSES
Siria
Tras 11 años años de guerra en el país, los niños siguen siendo víctimas de la violencia, el desplazamiento y la falta de acceso a los servicios esenciales, según la ONU. El años pasado, 900 niños perdieron la vida o resultaron heridos. Desde el inicio del conflicto suman 13,000 menores de edad muertos.
Yemen
Tras ocho años de guerra, en los próximos meses unas 19 millones de personas sufrirán hambre, lo que representa un 20 % más que el año pasado. «Alrededor de un tercio del trigo de Yemen proviene de Rusia y Ucrania, donde el conflicto actual puede restringir la oferta e incrementar los precios de los alimentos», dijo el secretario general adjunto de Asuntos Humanitarios y Coordinador del Socorro de Emergencia, Martin Griffiths.