El Banco Central de Reserva (BCR) reiteró que El Salvador cerró 2022 con una inflación del 7.2 %, siendo la más baja de Centroamérica, y la tercera de Latinoamérica, gracias a las estrategias económicas implementadas por el Gobierno hace un año para contener los efectos adversos internacionales.
«Las 11 medidas que lanzó el presidente Nayib Bukele contra la inflación evidentemente permitieron una baja en la inflación y permitieron que El Salvador se posicione como un referente en el mundo», destacó Douglas Rodríguez, presidente del BCR.
El funcionario explicó que entre esas medidas se encuentra la fijación de los precios de los combustibles, la cual se posicionó como una de las principales estrategias que benefició el bolsillo de miles de familias salvadoreñas; y la exoneración de impuestos de importación a productos de la canasta básica, una medida que recientemente se prorrogó hasta 2024.
También, según el titular del BCR, trabajo que realizan las instituciones de Gobierno para verificar y supervisar que estas medidas inflacionarias se apliquen y beneficien a los salvadoreños, también permitió que el año pasado los índices de inflación del país fueran menores a economías como la de Estados Unidos, que registró un 9.1 %, la tasa más alta de los últimos 40 años.
Dicha afirmación va en concordancia con la presentada por el Consejo Monetario Centroamericano que indicó que al cierre de 2022, El Salvador obtuvo la mejor tasa de inflación en la región con un 7.3 %.
«Las menores tasas de inflación al cierre de 2022 se registraron en El Salvador (7.3 %), Costa Rica (7.8 %) y República Dominicana (7.8 %). Honduras y Guatemala alcanzaron tasas de 9.2 % y 9.8 % en el mismo orden; mientras que Nicaragua registró la tasa más alta de la región con 11.5 %», indica el último informe publicado por la institución.
Por otra parte, el reporte afirma que, a pesar de los impactos adversos, la economía centroamericana creció a un ritmo relativamente sólido en 2022, debido en parte a la contribución de ingreso de remesas en la dinámica de la actividad económica.
En términos de los montos recibidos, los principales países receptores de remesas fueron Guatemala con $18,040.3 millones, seguido de República Dominicana ($9,856.5 millones), Honduras ($8,686.2 millones), El Salvador ($ 7,742 millones) y Nicaragua ($ 3,224.9 millones).