En el Hospital Francisco Menéndez, de Ahuachapán, cuentan con el servicio de tamizaje neonatal para detectar el hipotiroidismo congénito, que ocurre cuando un bebé recién nacido carece de la capacidad para producir cantidades normales de hormona tiroidea.
En la actualidad, este hospital es el que más pruebas hace a nivel nacional.
«Esta estrategia consiste en diagnosticar precozmente el hipotiroidismo congénito. La madre se va satisfecha al saber que se le está contribuyendo a darle un diagnóstico y se le da un tratamiento oportuno. Antes no se detectaba porque no se hacía, ahora al niño puede garantizársele una vida mejor», indicó Ana Mejía, jefa de la unidad de neonatos del hospital.
Estos exámenes se hacen por medio de una prueba de sangre extraída de un pie del recién nacido, y el resultado se da al mes. El examen pasa por los laboratorios del Hospital Benjamín Bloom, ya que es el especializado.
En caso de ser positivo, el mismo hospital da seguimiento a los cuidados necesarios para garantizar el tratamiento adecuado. Según autoridades del Hospital Francisco Menéndez, este año reportan 190 tamizajes. Se habían dejado de tomar desde hace dos años, pero el Gobierno Central logró construir una sala especial con una infraestructura moderna, por lo que desde mayo de este año se ha reactivado.
En el plan también se incluye el programa Mamá Cangura, que consiste en que las madres puedan dar lactancia materna a la hora que requiera su bebé en una sala adecuada, y también está la posibilidad de que puedan donar en el banco de leche.