Tras más de dos décadas de gestiones infructuosas y a pesar de haber sido fundada en Santa Ana, la seccional de Cruz Verde Salvadoreña (CVS) por fin ha hecho realidad el sueño de contar con instalaciones propias para continuar brindando el servicio social que ha caracterizado a la institución de socorro desde su fundación en 1970.
Cruz Verde recibió esta semana, de manos de Giovanny Zaldaña, diputado de la bancada cian por Santa Ana, las escrituras que la hace propietaria del inmueble y terreno donde tiene su base desde hace varios años, en la Aldea San Antonio, salida antigua a Chalchuapa, donde permanece desde hace 22 años, el cual era propiedad del Estado.
Zaldaña fue el gestor de la iniciativa que permitió a Cruz Verde recibir el inmueble, que era propiedad del Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología (Mineducyt), a través de un decreto aprobado por la Asamblea Legislativa a inicios de este año.
«La Cruz Verde hace una labor destacable. Cuando hay problemas, [los miembros de Cruz Verde] son los primeros en llegar. Han tenido que pasar 22 años para hacer posible la legalización de su sede, pero se logró, sí se podía hacer, pero los políticos del pasado no tuvieron la voluntad y el compromiso de acompañarlos», dijo el legislador cian.
Por su parte, representantes de CVS señalaron que contar con la seguridad jurídica del inmueble es un sueño desde sus fundadores, quienes aspiraban a contar con una base propia en la cual capacitar a los voluntarios y brindar un mejor servicio a la población.
«Este día es histórico porque recibimos las escrituras. Esto nos va a permitir trabajar en las mejoras estructurales del inmueble para tener un espacio que reúna las condiciones necesarias para que la juventud santaneca y la población en general puedan ser parte de nuestro voluntariado», sostuvo Francisco Roberto Miguel, director de la seccional santaneca de CVS.