Los casos de dopaje en el deporte no son exclusivos de una región en el mundo. En el caso de El Salvador, ha habido dos casos a escala del fútbol, en los últimos siete años.
En 2015, el volante de Águila, Kevin Santamaría, dio positivo a una prueba, cuando jugaba para el Municipal, de Guatemala. El jugador fue sancionado con dos años de suspensión, por Dimetilbutilamina. Tuvo que dedicarse a otra cosa que no fuera fútbol para llevar el sustento a su familia.
Luego, a inicios de la última semana pasada se conoció que el delantero, Érick Rivera, dio positivo a clostebol, tras el juego contra Canadá, del 8 de septiembre del año recién pasado. Por ahora, el atacante se ha puesto en la manos de un abogado auspiciado por FIFA, para poder reducir total o parcialmente el periodo de suspensión.
Sobre el caso de Rivera, Santamaría salió al paso para respaldarlo. Recordó que hace siete años, el responsable de su caso fue el médico de Municipal de ese entonces. Pero de igual manera se quedó sin jugar por dos años.
«Entiendo a Rivera. Le he dicho que siempre diga la verdad, que no oculte nada de cómo pasaron las cosas. porque, al final, es el nombre de uno el que se ensucia. Hasta este día, hay gente que en mi caso sabe que no hice nada y eso me deja tranquilo. Esto es difícil, siempre el jugador tiene la culpa y no es así, porque uno sabe que no lo ha hecho. Me hice pruebas en juegos de Concacaf y selección nacional y nunca me pasó nada. Pasar castigado dos años me arruinó muchas cosas en mi carrera», dijo el mediocampista emplumado, en plática con «Diario El Salvador».
Santamaría cree que en estos casos de dopaje alguien se tiene que hacer responsable. Insistió que en su caso, el médico de Municipal, en 2015, nunca asumió.
«Esto es bien difícil, porque en el dopaje dice que cada jugador es responsable de su cuerpo. En mi caso y en el de otros jugadores pasa que los doctores hacen cosas malas y te echan a vos la responsabilidad. Sé la clase de persona que es Érick. En mi caso, el doctor nunca se hizo responsable, pero mis compañeros y en el club sabían que yo no había hecho nada», externó el volante cuscatleco.