La inteligencia artificial (IA) ha venido a revolucionar la forma en la que se hacen las cosas y el caso de la industria de centros de datos no ha sido la excepción.
Expertos de Vertiv, un proveedor mundial de soluciones de continuidad e infraestructura digital crítica, han señalado las tendencias con más probabilidades de surgir en la industria de centros de datos para el próximo año.
La primera de ellas es la innovación en los sistemas de enfriamiento, pues señalan que las cargas de trabajo con un uso intensivo de recursos informáticos se intensificarán y, para gestionar este calor, se están adoptando soluciones de enfriamiento líquido más avanzadas y eficientes, como la inmersión y las placas frías.
«Esto pondrá más presión en los sistemas de alimentación y enfriamiento existentes, y llevará a los operadores de centros de datos hacia soluciones de enfriamiento por inmersión y de placa fría que eliminan el calor a nivel de los racks. Los centros de datos empresariales se verán afectados por esta tendencia a medida que el uso de la IA vaya más allá de los primeros proveedores de servicios de coubicaciones y nube», destaca un comunicado de prensa.
En segundo lugar, se encuentra una mayor demanda de energía, según los expertos la IA utiliza mucha energía, actualmente a nivel mundial, los centros de datos consumen en promedio 1-2 % del suministro eléctrico de todo el mundo, pero la IA aumentará dicho consumo y podría llevarlo al 3-4 % para 2030, señalan los expertos.
Ante este escenario, los centros de datos buscan alternativas energéticas más sostenibles y eficientes, como las microrredes y las energías renovables.
Por otra parte, la colaboración en la industria es otra de las tendencias identificadas, ya que los fabricantes de chips, los proveedores de infraestructura y los clientes están trabajando juntos para desarrollar soluciones más integradas y eficientes para las fábricas de IA.
«Esta colaboración incluye el desarrollo de herramientas que utilizan IA para agilizar la ingeniería y la fabricación de diseños estandarizados y personalizados. En los próximos años, los fabricantes de chips, los diseñadores de infraestructura y los clientes colaborarán cada vez más y avanzarán hacia la formación de asociaciones que permitan una verdadera integración de la infraestructura y la TI», señala Vertiv.
Con la implementación de la IA, la ciberseguridad también tiene un reto, ya que a medida los ciberdelincuentes sigan aprovechando la esta tecnología para aumentar la frecuencia de los ataques, los expertos en ciberseguridad, los administradores de redes y operadores de centros de datos deberán mantenerse al día y desarrollar sus propias y sofisticadas tecnologías de seguridad de IA.
Por su puesto, los gobiernos juegan un papel en todo este escenario, en el que se prevé que para el 2025 se enfocará en las regulaciones del uso de la inteligencia artificial,
«Las entidades normativas y los gobiernos de todo el mundo se encuentran en una carrera por evaluar las implicaciones de la IA y desarrollar una buena gobernanza para su uso», explican.