Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por su sigla en inglés) detallan que por medio de la aplicación de las pruebas de detección se puede reducir la propagación del coronavirus.
«Las pruebas de detección de la COVID-19 son una de las varias medidas de reducción de riesgos junto con la vacunación, el uso de mascarillas y el distanciamiento, que lo protegen y protegen a otras personas porque reducen las probabilidades de propagación del virus», detalla la entidad en su página web.
Los CDC recomiendan someterse a una prueba de detección si se presentan los síntomas de la infección por coronavirus, o cuando han transcurrido al menos cinco días de haber tenido contacto cercano con alguien positivo.
En El Salvador, la vigilancia epidemiológica por medio de la aplicación de pruebas de Reacción en Cadena de la Polimerasa (PCR, por su sigla en inglés) es una de las estrategias principales que el Gobierno ha implementado para la identificación nuevos casos de la COVID-19.
El Ministerio de Salud (Minsal) incrementó a 5,000 PCR diarias a escala nacional desde el 18 de enero de este año, lo que generó una mayor cobertura de población y capacidad de detección de los nuevos casos de coronavirus.
«Vale la pena recordar que no todas las personas que resultan con la prueba positiva presentan síntomas. Un 80 % es asintomática», advirtió el Gobierno en un comunicado.
Estas pruebas tienen el 99.99 % de efectividad para la identificación del virus. «Los resultados son confiables para personas con y sin síntomas», señalan los CDC respecto a las PCR.
A la fecha, en el país se registran 1,758,939 de PCR aplicadas a escala nacional, con las que se han podido identificar 156,000 casos de coronavirus. El Minsal aplica gratuitamente las pruebas a la población, de manera que el acceso esté al alcance de quienes desean conocer su estado de salud ante la COVID-19.
Actualmente, toda persona que es detectada positiva (ya sea en tamizaje comunitario del Minsal o por medio de pruebas PCR o antígeno en laboratorios privados) recibe tratamiento farmacológico con molnupiravir, un tratamiento antiviral de última generación para disminuir hasta el 50 % la posibilidad de complicaciones.
No obstante, tanto los CDC como las autoridades de Salud del país recomiendan la importancia de vacunarse oportunamente para prevenir cualquier riesgo de contagio que pudiese poner en peligro la vida de la persona. «Los CDC recomiendan que todas las personas elegibles estén al día con las vacunas contra la COVID-19, incluidas las personas con el sistema inmunitario debilitado», exhortan los CDC.