El Gobierno continúa con las estrategias para generar una estabilidad alimenticia en el país, así como el incremento en la producción agrícola nacional. En ese sentido, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) realizó la liberación del insecto «Diachasmimorpha longicaudata», un depredador natural de la mosca de la fruta, la cual causa serios problemas fitosanitarios para la industria frutícola nacional.
El proyecto tendrá una fase de instalación, para la cual fue seleccionada la Cooperativa San Carlos para lanzar la ejecución piloto, dicha asociación apuesta por el cultivo de mango panadés, guayaba y papaya. Con la liberación se están beneficiando más de 100 familias que hacen vida en la cooperativa.
El titular del MAG, Enrique Parada, afirmó que se ha reportado brote de esta plaga, por lo que el Gobierno tomó acciones para controlarla.
«Estamos trabajando de manera exhaustiva por nuestros agricultores. Al igual que con esta medida, vamos a seguir generando proyectos que reducirán gastos, mejorarán los mercados y la cadena de producción local, que beneficiará a muchas familias salvadoreñas», indicó el ministro.
Según el MAG, las moscas de la fruta provocan daños directos que incluyen la destrucción del fruto, reducción de su valor comercial y disminución de la producción, afectando la seguridad alimentaria y nutricional.
Además, la plaga genera un aumento en los costos de producción, debido a la aplicación excesiva de agrotóxicos y de otras medidas de control, elevando el costo de la fruta, así como también se restringen las posibles entradas a los mercados internacionales.
El plan del MAG, por medio de la Dirección General de Sanidad Vegetal (DGSV), es liberar de manera escalonada tres millones de insectos estériles semanalmente en el cultivo de las principales frutas en producción. Esta semana el ministro Parada liberó el primer grupo de insectos.
Los insectos son depredadores naturales de dicha plaga, por lo que controlan la proliferación y serán una alternativa económica y amigable al ecosistema, ya que se reducirá el uso de químicos para combatirla.
En la actualidad, la DGSV está en una fase de investigación y desarrollo científico para la reproducción y cría del insecto estéril, la cual incluye una instalación de empaque de última generación y un centro de operaciones de campo para mantener las áreas libres o de baja prevalencia de la mosca de la fruta.
Por su parte, el gerente de la Cooperativa San Carlos, Salomón Zelada, agradeció al Gobierno por el paso firme, porque desde su experiencia de más de dos décadas, el problema nunca había sido tratado por las administraciones anteriores.
Con esta estrategia, el Gobierno busca contribuir a la seguridad alimentaria en el país, mejorando la producción de fruta sana, con el fin de beneficiar al sector frutícola y de generar buenas condiciones a futuro para la exportación de fruta.