Ninguna irregularidad en el desarrollo de las elecciones presidencial y legislativa hubiese logrado alterar el total de votos que recibió el presidente de la república, Nayib Bukele, ni el de las candidaturas a diputaciones de la Asamblea Legislativa, afirmó Guillermo Wellman, magistrado del Tribunal Supremo Electoral (TSE) en entrevista con «Diario El Salvador».
«Hay una elección superada que cualquier irregularidad, ni 100, ni 200 irregularidades van a venir a decir aquí que el pueblo salvadoreño no determinó el voto del 4 de febrero, tanto en la elección presidencial como de Asamblea Legislativa», expresó.
Wellman recordó los informes de la Organización de Estados Americanos (OEA) y de la Procuraduría General de la República (PGR) en los que señalan que, a pesar de las fallas en aspectos logísticos y tecnológicos durante el escrutinio preliminar de las elecciones anteriores, no hubo interferencias en los resultados.
Dichos informes constatan que el mandatario Nayib Bukele ganó la presidencia de la república para un segundo periodo con una cantidad de votos histórica, superando los 2.7 millones, y la diferencia de sufragios en comparación con el candidato que quedó en segundo lugar, Manuel Flores, del FMLN, fue de 30 veces más.
«Han comprobado con toda seguridad de que la voluntad del elector fue respetada, cualquier señalamiento que se le haga al Tribunal queda completamente “outside” [fuera de lugar], en el sentido de que ahí están las papeletas con el voto del pueblo y que es bastante relevante el hecho de que no es una diferencia como en otras elecciones, así como en 2018 y 2015, que eran bien cercanos los cómputo de votos; ahora no, ahora es tajante», dijo Wellman.
El presidente Nayib Bukele ganó nuevamente la silla presidencial con el 84.7 % de los votos válidos a su favor, para gobernar en el periodo 2024-2029, según los informes del escrutinio final.