En cada una de las notas que proyecta con su melodiosa voz, el ambiente parece llenarse de colores, la vida toma una armonía de paz y todo parece vibrar en perfecta sincronía con el espíritu mismo de la música. Pero, para Ale Martore, desarrollarse en el mundo de la música no ha sido fácil, sobre todo, cuando tuvo que superar muchas dudas y temores que habitaban en lo profundo de su mente, para poder demostrar su talento y conquistar sus sueños.
Con una carrera ya establecida en el mundo de la música, así como también en la televisión y el cine, Ale Martore es una de las voces más talentosas de El Salvador. Su hoja de vida incluye muchos espectáculos de teatro musical en el país y presentaciones nacionales e internacionales. Sin embargo, para ella, todo eso pasa a un segundo plano, cuando lo más importante es simplemente disfrutar de crear música y expresarse a través de ella.
En su niñez, diversas experiencias amenazaron con cortar las alas de sus sueños. Pero, con los años, encontró la fortaleza para extenderlas y cruzar más allá de los grises cielos de las dudas, encontrándose con un auténtico tesoro tras el arcoíris: la posibilidad de expresarse a través de su música y cumplir ese sueño que siempre permaneció con vida en su interior, a pesar de las dudas.
Iniciemos con algo simple: ¿Quién es Ale Martore?
Soy una persona con sueños, que amala vida, que ama a su familia, a sus hijos, y que tiene un profundo amor por la música. Creo que la forma que he encontrado para expresar mi ser interior es por medio de la música. Por eso para mí es tan importante.
¿Cómo inició tu carrera musical?
Inició un poco estropeado. Desde chiquita me encantaba la música. Veía «La Novicia Rebelde» en la televisión y veía cómo cantaban y para mí eso era un sueño. Yo soñaba cantar como ella. Pero, están en el colegio, en la época de la guerra, teníamos una maestra que era súper buena, pero tuvo que irse por la guerra, porque ella era americana. Después, me pusieron una maestra que no era tan buena, pero habíamos estado ensayando durante meses para la clausura y me habían puesto al frente del micrófono para cantar una canción.
Me puse en el lugar donde la maestra anterior me había puesto y, cuando llegó esta nueva maestra me miró y dijo: «¿Qué estás haciendo ahí? ¡Tenés una voz horrible! ¡Tenés una voz espantosa! ¡Andate para allá!». Tenía como seis años y me quedé con ese pensamiento en mi cabeza. Crecí pensando que no podía cantar. Pero, cuando algo te encanta y te apasiona, no importa lo que pase, siempre en alguna parte de tu vida eso vuelve a surgir y tu camino se vuelve a encarrilar. Ya de mayor dije que quería cantar porque a mí me gustaba, sin importar lo que los demás dijeran.
¿Qué género musical es con el que más te identificás?
Empecé en canto lírico y fue una experiencia maravillosa. He conocido personas muy preparadas con quienes he educado mi voz. Empecé dentro de lo lírico, pero poco a poco comencé a tocar instrumentos y comencé a componer. Mis composiciones no son líricas, ni clásicas, sino que era pop. Empecé en un pop lírico, si lo podemos definir, y, ahora, estoy más en el ámbito popular.
Conocemos muy poco sobre ese proceso creativo que tienen los artistas para componer. En tu caso, ¿cómo es ese proceso creativo?
Cada vez es diferente. A veces, uno pasa por emociones súper fuertes que, en mi caso, la música me ayuda a poder expresarlas. De repente, en la canción de «New Beginning», es una canción que habla sobre un nuevo comienzo, la compuse mientras pasaba por una etapa muy difícil en mi vida, donde, de repente, me di cuenta de que tenía que volver a empezar con mi vida por completo. Esa canción me ayudó a canalizar ese momento y la compuse en una noche.
A veces hay letras que vienen a tu mente y después juegas con un par de acordes y compones algo nuevo. Otras veces es diferente. Pero es siempre una forma de expresar las emociones que tenemos dentro de nosotros.
Mucha gente me ha dicho que debería dedicarme a cantar covers, pero, en realidad, amo cantar mis propias canciones, me encanta crear mi propia música y expresarme a través de ella., canto algunos covers, pero, también, en mis presentaciones llevó siempre mis propias canciones y trato de combinar entre mis composiciones y algunos covers.
Tu experiencia de pequeña pudo haber cortado tus alas en este sueño. Eso suele sucederles a muchos en este país. ¿Qué le dirías a quienes han enterrado su sueño artístico por las críticas negativas que han recibido?
Lo que nos dicen las personas nos marca. Las personas pueden marcarnos de una manera positiva o negativa. Esas palabras se van repitiendo en tu cabeza, pero solo tú puedes quitarles poder a esas palabras. Podemos decir que esas palabras no van a marcarnos y que no importa si las otras personas piensan que lo hacemos bien o lo hacemos mal, vamos a hacerlo porque nos gusta. No dejemos que otras personas decidan qué haremos con nuestras vidas. No dejemos que las palabras de otras personas nos definan. Nosotros podemos trazar en nuestro lienzo personal lo que quereos dibujar en nuestra vida.
¿Qué te ha dejado la música personalmente?
Me descubrí por medio de la música. Estaba estudiando Derecho y no entendía porque estaba como deprimida. Recuerdo que una persona me dijo: «Deberías empezar a hacer cosas que te gusten». Yo le decía que no tenía tiempo, pero esta persona me dijo: «Ale, hacelo. Dedica una parte del día para hacer lo que te encanta». Me preguntó que qué me gustaba hacer y le dije que cantar, pero que no podía cantar. Me animó a que no me importara lo que otras personas me hubieran dicho y que tomara clases de canto. Recuerdo que decidí hacerlo, tomé clases de canto y una maestra me escuchó y, de repente, me estaban dando una beca para estudiar ópera.
Si yo no hubiera decidido que no me importaba lo que pasaba y que iba a seguir mi corazón y lo que yo deseaba, nunca hubiera descubierto que puedo cantar. Todos debemos seguir nuestro corazón y hacer lo que deseamos. Así es como descubriremos nuestro camino.
Eres una «Mamá Musical». Estas formando a tus hijos en un ambiente en el que están rodeados de música y arte. ¿Alguno de ellos ha heredado tu camino musical?
Mi hijo mayor es bien entonado. Desde pequeño me llamaba la atención que tenía una habilidad increíble para reproducir sonidos de todo tipo, el sonido tal cual. Pero no tiene la rama musical. Lo inscribí en el coro de la escuela este año, pero me dijo que no le gustaba. Mi hijo más pequeño es súper musical, le encanta estar en medio de músicos y escuchar música, le atraen los instrumentos. Es bastante musical.
Y desde tu experiencia como madre, ¿cómo crees que ayuda la música a la formación de los niños?
La música nos vuelve personas más sensibles y nuestro mundo necesita personas más sensibles, porque no estaríamos en la situación en que estamos si los seres humanos tuviéramos más contacto con nuestro corazón, con nuestro ser y si fuéramos capaces de ser empáticos con las otras personas. La música y el arte te hacen más sensible y empático.
En este país, muchas veces, las familias ven el arte como un hobby o una distracción para el niño. Pero, desde tu experiencia, como artista y como madre, ¿qué le dirías a esas familias que no apoyan o no ven a sus hijos en una carrera artística?
Yo les diría que no se pusieran límites. Lo más importante, como papás, es apoyar a nuestros hijos en sus sueños, impulsarlos a que sigan adelanto. Uno, a veces, se pone límites, pero nuestros hijos, muchas veces, tienen talentos y habilidades para ser grandes y ser artistas importantes en este país. No hay que ponernos límites y pensar que, solo porque estamos en este país, no podemos crecer y alcanzar nuestros sueños. Tampoco podemos limitar a nuestros hijos y frenarlos. Hay que apoyarlos y ayudarles a que desarrollen toto su potencial.
Hablemos ahora de tus proyectos musicales. ¿Hay algo nuevo que estés preparando?
Tengo bastante música por producir aún. A veces, compongo la música, me encanta la composición, voy al estudio, grabo, hago el video, pero, al momento de promocionar, es lo que más me cuesta. Tengo varias canciones que he subido a mi Instagram, pero que después no les he dado seguimiento. Sin embargo, por ahora estoy trabajando en un disco con varias canciones que compusimos con Armando (Solórzano) durante dos años. Ya están trabajándose en Guatemala y nos reuniremos con músicos para madurar las ideas y llevarlas al estudio.
Será un material con varias canciones que he compuesto con Armando, aunque también hay varias canciones que he compuesto yo sola.
¿Te ves dejando la música en algún momento de tu vida?
Mirá, es que, para mí, el día que yo deje de cantar, dejo de vivir. Yo hago música porque me llena el alma y si puedo motivar a alguien a través de eso, o motivar a mis hijos, pues lo haré con mayor intensidad. Quiero que mis hijos crezcan rodeados de música. Mucha gente piensa que es un ambiente malo, pero nada que ver. La música te enriquece tanto. Si querés presentarte en un escenario, si querés aprender a tocar algún instrumento, tenés que tener mucha disciplina y mucha dedicación. La música te da muchas habilidades y te forma como persona.
En mi caso, quiero siempre llevar la música al lado de mi experiencia como madre y que mis hijos compartan esta parte de mi vida conmigo. Quiero que ellos se formen como personas más sensibles y eso puedo lograrlo a través de la música.
Ale Martore también tiene otra faceta artística. ¿Cómo fue que te iniciaste en la actuación?
Fijate que comencé en el teatro musical, pero, aunque es diferente estar en un escenario musical y otra estar frente a una cámara, una cosa llevó a la otra y empecé a hacer anuncios de televisión. Luego, el año pasado, me llamaron para hacer una película que se llama «El Suspiro del SIlencio». La película estuvo en los cines acá en El Salvador y, aunque fue un papel pequeño el que tuve, para mí fue emocionante ver cómo cumplía otro sueño de mi niñez.
También hay otra película que pronto va a salir. En ella tuve la oportunidad de interpretar a una detective y estoy muy emocionada por ese nuevo proyecto del que ya pronto se conocerán más detalles.