Como tener ojos en la naturaleza, así funcionan las cámaras trampa que ha instalado el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN) en áreas naturales protegidas de El Salvador. Actualmente hay dos estaciones de monitoreo permanentes en la zona oriental del país, y cada una cuenta con 40 cámaras trampa.
Dichas cámaras han hecho importantes descubrimientos. En 2021 confirmaron que hay pumas residentes en El Salvador, y en los últimos dos años han identificado el incremento de felinos silvestres en el país.
Estos importantes descubrimientos han impulsado el Programa Nacional de Conservación de Felinos, y ahora el MARN proyecta instalar cámaras trampa en las 15 áreas naturales protegidas del país, donde hay presencia de felinos.
De acuerdo con la técnica en Gestión de Vida Silvestre del MARN, Noemí Cruz Guerra, con esto se tendrá una amplia cobertura del hábitat de las cuatro especies de felinos que viven en el país: puma, gato zonto, tigrillo y ocelote.
«En la primera estación tenemos el registro de las cuatro especies de felinos que están reportadas en el país. La meta es que en cada una de las 15 áreas de conservación en El Salvador se coloque una estación», dijo Cruz a «Diario El Salvador».
Con las cámaras trampa se obtiene información sobre estas especies, el hábitat, la dieta, las presas disponibles, el desarrollo de los ejemplares y la cantidad de la población en la zona. Esta información permitirá que, próximamente, El Salvador cuente con producción científica local sobre los grandes felinos, pues los técnicos están sistematizando los datos registrados y crearán el primer documento científico sobre los felinos.
«De ese primer año se va a publicar un volumen específico sobre felinos en la revista científica de la Universidad de El Salvador. Estudiantes o voluntarios podrán elaborar documentos científicos sobre la dieta, la reproducción de los felinos, la presencia de presas y la cantidad de población en el territorio», señaló la técnica.
En paralelo con la ampliación de las cámaras trampa, el MARN capacita al personal que usa estos equipos, que está conformado por biólogos, guardarrecursos y especialistas.
Recientemente participaron en un taller regional de fototrampeo para analizar los datos de las cámaras, en el que se reunieron especialistas de Belice, Honduras, Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica y Panamá. El taller permitió ampliar sobre los rasgos distintivos de las especies, la frecuencia de captura y los patrones de la actividad de las especies. Además de las prácticas que emplean los datos recolectados en cada área natural protegida prioritaria del Programa Enlazando el Paisaje Centroamericano.
«Con esto queremos conocer la biodiversidad de la zona, ya que hay especies que son escurridizas ante la presencia humana y que con otra metodología no las podríamos captar», dijo Cruz.